Larraín reconoció que "hay espacio para mejorar" el reglamento de crédito universal
La norma apunta a que los consumidores puedan comparar los precios finales de los préstamos.
Se ha criticado falta de información por parte de las entidades financieras.
El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, reconoció este miércoles que aún "hay espacio para mejorar" la normativa sobre créditos universales que entró en vigencia el día lunes y que obliga a los bancos, cooperativas, cajas de compensación, empresas de retail y aseguradoras que efectúan préstamos a "estandarizar" sus indicadores para que los clientes puedan comparar los costos finales.
El reglamento señala que las entidades crediticias deben ofrecer esta información "a través de publicaciones físicas o en internet, en anuncios televisivos o de cualquier otra forma que ella determine".
Desde su entrada en vigor se ha constatado que la mayoría de las instituciones optó por publicar los datos en internet y no en forma física en sus sucursales, manteniendo una desinformación que, a juicio del diputado DC Fuad Chahín, da cuenta de una "falta de voluntad" para avanzar en la transparencia del mercado.
"El crédito universal está recién partiendo. Creo que siempre hay espacio para mejorar y nosotros nos vamos a preocupar -velando por el interés de los consumidores- que la norma se aplique adecuadamente y que vaya progresando, y si ha habido alguna deficiencia en su punto de partida, nos vamos a preocupar de que se mejore", señaló Felipe Larraín.
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| El ministro anunció además que la próxima semana iniciará las conversaciones sobre el reajuste al sector público. (Foto: UPI) |
Reajuste para el sector público
El titular de Hacienda anunció además, escuetamente, que "la próxima semana" iniciará las conversaciones con los dirigentes del sector público para acordar el monto del reajuste que se aplicará a sus remuneraciones a contar del 1 de diciembre.
En una reunión efectuada el día lunes, los 14 gremios agrupados en la Central Unitaria de Trabajadores acordaron por unanimidad solicitar un reajuste de 9,8 por ciento, cifra que se calculó considerando el IPC más la tasa de crecimiento prevista para el próximo año.
Larraín evitó pronunciarse sobre dicha cifra e indicó que lo hará "cuando recibamos la propuesta de los gremios" de manera formal, en el marco de las conversaciones.
La discusión del año pasado se desarrolló en medio de fuertes movilizaciones lideradas por la ANEF, que concluyeron con un incremento nominal del 4,2 por ciento que no dejó satisfechos a los empleados públicos.