España entrará en recesión en 2012 y se extenderá hasta 2013, según Goldman Sachs
El banco vaticina que la economía española cerrará este año con un leve crecimiento del 0,6 por ciento.
Para el próximo año, espera una contracción de 1,5 por ciento en el PIB.
España entrará en recesión el próximo año con una contracción de su Producto Interno Bruto (PIB) del 1,5 por ciento que se extenderá hasta 2013 con un retroceso del 0,2 por ciento, según el banco estadounidense Goldman Sachs.
En el último informe con sus proyecciones para los próximos dos años, el banco vaticina que la economía española cerrará este año con un leve crecimiento del 0,6 por ciento pero que la situación empeorará en 2012 debido al deterioro de la crisis de deuda en la zona euro.
Además, los analistas de Goldman Sachs prevén que el Indice de Precios al Consumidor (IPC) español cerrará este año con una subida del 3 por ciento, y que los precios sigan creciendo el 1,4 por ciento en 2012 y el 1,1 por ciento en 2013.
El banco también revisó a la baja sus previsiones para la zona euro por el deterioro de la crisis de deuda en la región, que cerrará este año con un crecimiento del 1,5 por ciento, pero se contraerá el 0,8 por ciento en 2012, para volver a crecer el 0,7 por ciento en 2013.
Los analistas de Goldman Sachs prevén que la crisis de deuda en la zona euro siga dominando a corto plazo la atención de los mercados, cuya evolución dependerá en gran medida de la respuesta que den los gobiernos europeos.
En todo caso, la entidad estadounidense considera en su informe que la alternativa de una "ruptura" en la zona euro y una recesión más profunda es "significativamente" menos probable, aunque admite que es "ciertamente posible".
Estados Unidos y el resto del mundo
En el caso de EE.UU., Goldman Sachs pronostica que la economía de la primera potencia del mundo concluirá este 2011 con un crecimiento del 1,7 por ciento, después registrará una leve ralentización en 2012 al crecer el 1,5 por ciento, y al año siguiente lo hará a un ritmo del 2,2 por ciento.
Sus pronósticos para la economía mundial también los ha revisado a la baja, y ahora prevé un crecimiento del 3,2 por ciento para el próximo año frente al 3,4 por ciento que vaticinaba anteriormente, mientras que para 2013 espera que el PIB mundial crezca el 4 por ciento.
En el caso de Latinoamérica, predice que cerrará 2011 con un crecimiento del 4,5 por ciento, impulsado por el buen desempeño de la economía argentina, que liderará la región con una subida del 7,4 por ciento, mientras que en 2012 la región crecerá el 3,3 por ciento y el 4,3 por ciento en 2013,
Por último, vaticina que seguirá la escalada de precios de las materias primas con un aumento del petróleo del 10 por ciento para situarse en torno a 120 dólares el barril de Brent, el crudo de referencia en Europa, que en la actualidad se negocia a unos 110 dólares.