Ministro de Economía francés: Reducir el endeudamiento es la forma de recuperar soberanía
Francois Baroin justificó la disciplina presupuestaria de los acuerdos asumidos por la Unión Europea.
Calificó como "cumbre histórica" el Consejo Europeo que concluyó el viernes en Bruselas.
El ministro francés de Economía, Francois Baroin, justificó la disciplina presupuestaria que imponen los acuerdos de la cumbre europea de esta semana y puso el acento en que para un país reducir el endeudamiento es la forma de recuperar soberanía.
"Cuando tenemos un 80 por ciento de la financiación que pasa por los mercados, por los inversores, y dependemos de ellos, ahí hay más riesgos de perder nuestra soberanía", señaló Baroin en una entrevista a la cadena de televisión France 2.
En respuesta a una pregunta sobre la supervisión a la que está sometida su acción desde el exterior, reconoció que la soberanía es una cuestión importante, pero insistió en que por eso en las condiciones actuales "reducir nuestro endeudamiento es recuperar plenamente nuestra soberanía".
El ministro francés consideró que el Consejo Europeo que concluyó el viernes en Bruselas "ha sido una cumbre histórica" en la que el presidente francés, Nicolas Sarkozy, y la canciller alemana, Angela Merkel, "han estado a la altura".
A su juicio, esa reunión ha respondido a todas las problemáticas planteadas en los últimos 18 meses, empezando por el de la gobernanza en la zona euro.
A la cuestión de cuáles serán las sanciones para un país si se supera el límite de déficit público, se limitó a contestar que "la Comisión (Europea) estar habilitada a preparar sanciones", sin dar más precisión.
Añadió que de lo que se trata es de tomar medidas preventivas para no llegar a ese extremo.
En cuanto a la amenaza de las agencias de calificación de riesgo de rebajar la nota soberana de Francia, como la de otros países de la eurozona, Baroin indicó que "esta cumbre no se ha hecho por Standard and Poor's, por Fitch o por Moody's" aunque no se descuida "ningún mensaje".
Y puso el acento en que con las medidas adoptadas "no se trata sólo de contentar a las agencias de calificación o a las instituciones europeas, sino de proteger a nuestros contemporáneos y a las generaciones futuras"