Portugueses protestaron contra su presidente por lamentar el recorte de su pensión
Aníbal Cavaco aseveró que ahora "casi seguro" no alcanzará a pagar sus gastos.
Manifestantes pidieron un euro para "ayudar" al jefe de Estado.
Decenas de portugueses protestaron este martes en Lisboa después de que el presidente del país, Aníbal Cavaco Silva, se lamentara del recorte de sus pensiones y pidieron, con ironía, un euro para "ayudar" al jefe del Estado.
Esta protesta pacífica tuvo lugar junto a la residencia oficial del presidente, quien el pasado viernes explicó a los periodistas que la suma de sus dos pensiones "casi seguro que no va a ser suficiente para pagar" sus gastos.
El mandatario, que trabajó décadas como catedrático y como economista en el Banco de Portugal, calculó una de ellas en 1.300 euros mensuales (1.629 dólares; 835.000 pesos chilenos).
Las declaraciones de Cavaco Silva, que en 2011 renunció a su sueldo presidencial de 6.523 euros mensuales por estar obligado a elegir entre pensión o salario, encendió los ánimos del país, que atraviesa la peor recesión de las últimas décadas bajo las duras condiciones de un préstamo internacional.
Las explicaciones del presidente
Ante el revuelo provocado, Cavaco Silva, cuyo cargo le confiere la sanción de leyes pero no la elaboración de las mismas, emitió un comunicado para explicar que no fue "lo suficientemente claro", asegurando que no quiere "eximirse de los sacrificios" que exige la actual crisis.
"Apenas quise ilustrar con mi ejemplo que acompaño las situaciones que llegan a mi conocimiento de ciudadanos que atraviesan dificultades y acerca de las cuales he llamado la atención en diversas intervenciones públicas", indicó.
A las críticas de algunos movimientos populares se han unido los reproches de los partidos de la izquierda marxista y de varios dirigentes regionales, que le achacan falta de sensibilidad ante las penurias que viven otros pensionistas del país.