China aprobó millonario plan de ayuda para Corea del Norte, según diario japonés
Esta consistiría en 500.000 toneladas de alimentos y 250.000 toneladas de petróleo.
La decisión se habría adoptado sólo un día después de que se anunciara el fallecimiento de Kim Jong-il.
China aprobó un paquete de ayuda de 500.000 toneladas de alimentos y 250.000 toneladas de crudo para Corea del Norte tras la muerte de su líder Kim Jong-il, el pasado 17 de diciembre, según publicó este lunes el diario japonés Tokyo Shimbun.
El rotativo, que cita fuentes chinas y norcoreanas sin identificar, afirma que la decisión de enviar esta asistencia se tomó tan solo un día después de que el régimen norcoreano anunciara el fallecimiento de Kim Jong-il.
Por el momento el Ministerio chino de Asuntos Exteriores no ha confirmado la aprobación de la ayuda que, según el Tokyo Shimbun, busca contribuir a mantener la estabilidad en Corea del Norte bajo el mandato de su nuevo líder, Kim Jong-un.
El hijo menor y sucesor de Kim Jong-il (quien llevó las riendas del régimen comunista durante diecisiete años) parece haber consolidado su poder con el apoyo de las poderosas Fuerzas Armadas norcoreanas, que han mostrado públicamente su lealtad al nuevo líder.
China es el principal aliado de la empobrecida Corea del Norte y su mayor suministrador de ayuda energética y humanitaria.
El régimen comunista es actualmente liderado por Kim Jong-un. (Foto: EFE) |
Necesaria asistencia
El país comunista ha dependido de la asistencia humanitaria internacional desde la década de los años noventa, cuando sufrió una hambruna en la que se calcula que pudieron morir unos dos millones de personas, de los cerca de 25 millones de su población.
En medio de las sanciones internacionales en vigor por su programa nuclear, Corea del Norte recibe también asistencia de organismos como el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), la Organización Mundial de la Salud (OMS) o de organizaciones civiles surcoreanas.
La reanudación de la ayuda humanitaria y el fin de las sanciones son las dos principales cartas con las que EE. UU. busca convencer Corea del Norte para que suspenda su programa de enriquecimiento de uranio y dé muestras de su voluntad de desnuclearización.
Por su parte, Corea del Sur ha denunciado en varias ocasiones que el régimen de Pyongyang desvía al Ejército parte de la ayuda humanitaria destinada a civiles o la almacena para las celebraciones previstas para conmemorar, en abril de este año, el centenario del nacimiento del fundador del país, Kim Il-sung.