Acumulando pérdidas por 3.300 millones de dólares el Transantiago cumple cinco años
El cuestionado sistema de transporte comenzó su funcionamiento, caóticamente, el sábado 10 de febrero de 2007.
Cuatro ministros han intentado mejorarlo, sin lograr aún la aprobación de la población.
Este viernes se cumplen exactos cinco años de la entrada en funcionamiento del polémico plan Transantiago, el sábado 10 de febrero de 2007.
Buses modernos pero insuficientes, recorridos confusos, frecuencias erráticas, infraestructura diseñada pero no construida y un software tecnológico que nunca operó fueron, desde entonces y hasta hoy, las principales falencias que se han imputado al sistema.
Según cifras publicadas por La Tercera, en este primer lustro de vida, el Transantiago ha obligado al Estado a desembolsar más de 4.433 millones de dólares en subsidios para cubrir 3.300 millones en pérdidas, y montos compensatorios de 1.133 millones para regiones.
El diario destaca que con las pérdidas, el Fisco podría haber financiado completamente los 2.500 millones de dólares que cuesta el plan de reconstrucción de 220.000 viviendas afectadas tras el terremoto de 2010.
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| El ministro Pedro Errázuriz asegura que en los próximos meses habrá "cambios notorios. 2012 será el año de la transformación", dijo. (Foto: UPI) |
Al día de hoy, y pese a las múltiples mejoras que han intentado implementar cuatro minsitros de transporte, el Transantiago funciona con un alto nivel de rechazo y una tarifa que ha subido 10 veces en los últimos dos años y que ha encumbrado los niveles de evasión en 21 por ciento.
El actual titular de ramo, Pedro Errázuriz, reconoció al diario que "el sistema aún tiene una gran deuda: la calidad de servicio a los usuarios. Y es allí donde este año las personas comenzarán a notar los cambios, y ese será el principal objetivo de mi trabajo".
Según explicó, "el año pasado el foco fue cambiar los contratos pensados en las empresas por contratos pensados para las personas. Lo logramos. Ahora, estamos renegociando con el Administrador Financiero del Transantiago (AFT) y buscando el financiamiento definitivo de un servicio de calidad, de modo de devolver la dignidad a los usuarios", explica.
"El gran desafío de este año será devolver la confianza, la certeza en los tiempos de viaje, la calidad, por medio de una malla de recorridos pensada en los usuarios, menos transbordos, buses que sí se detienen en paraderos y que respetan frecuencia y regularidad. El 2012 será el año de la transformación. Los cambios serán plenamente notorios en diciembre", agrega Errázuriz.