Sepa cómo actuar con los niños después de un sismo
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Autor: Cooperativa.cl
Los adultos deben mantener la calma y contener a los menores.
Revise los 10 consejos que elaboró la Asociación Chilena de Seguridad.
Un sismo provoca miedo especialmente en los niños, quienes en su mayoría no entienden lo que está ocurriendo, por eso los padres deben mantener la calma y saber contener a los niños frente a estos escenarios.
Por ello, la Asociación Chilena de Seguridad (AChS) entregó 10 consejos a los padres para ayudar a los niños.
- Mantenga la calma y traspásesela a su hijo(a). Ante otras réplicas intente no gritar, llorar, ni arrancar. Proteja a su hijo(a) pero con control.
- Después del sismo, dé una explicación real y simple de lo sucedido y no les mienta diciendo "esto no va a volver a suceder", ni asocie las causas del terremoto a seres, entes, animales o cosas.
- Los niños(as) pequeños necesitan hablar poco, en corto tiempo, pero más frecuentemente de lo que ha sucedido. Es bueno validar lo que los niños(as) piensan y sienten. Hágales saber que sus preguntas o comentarios son importantes.
- Ayúdelos (as) a expresarse. Hay niños(as) que no querrán hablar de lo sucedido, pero pueden preferir expresarse a través de dibujos o juegos. Los puede ayudar invitándolos a dibujar o hacer un relato de lo que vivieron.
- Evite que vean televisión y escuchen las noticias de la radio y trate de ser usted la fuente de información de sus hijos(as) o de mediar la información que escuchan o ven de otras fuentes.
- Dé consuelo efectivo. Pase más tiempo con ellos(as), genere más contacto físico (tóquelos, abrácelos, béselos) y juegue más tiempo con ellos(as).
- Vuelva a la rutina lo más pronto posible, haciendo las cosas que normalmente se hacían antes del terremoto y trate de proveer espacios de juego.
- La mayoría de los niños(as) se recuperan con su apoyo después de las dos primeras semanas.
- Recuerde que usted también está bajo tensión emocional. Cuídese para así poder brindar el apoyo necesario a sus hijos(as).
- Incorpórelos en ayudar a otros, por ejemplo colaborando en la entrega de alimentos no perecibles. Es positivo que los niños sepan que hay personas ayudando a quienes fueron más afectados por el terremoto.