Hernán Larraín: Si el Gobierno sigue mirando encuestas vivirá preso de la angustia
"Queda poco tiempo" y hay que "seguir impulsando el programa", dijo a %b%Cooperativa el senador UDI.
Aseguró que "cuando la gente advierta que no hay ningún cálculo ni doble intención cambiará su juicio".
El senador de la UDI Hernán Larraín reivindicó este viernes en Cooperativa su percepción de que el Gobierno tiene "un problema de fondo", ante lo cual le sugirió dejar de preocuparse de las encuestas y dedicarse a impulsar su programa antes de que la carrera presidencial -que se adelanta como "deporte nacional" en la Alianza y la Concertación, donde "la gente no solamente es proclamada, sino que se autoproclama"- monopolice todo el debate.
"Mi diagnóstico es que aquí hay un problema de fondo: yo creo que este Gobierno es un muy buen Gobierno, que ha hecho muchas cosas", pero a pesar de todos sus logros, principalmente en el plano económico, "la evaluación es negativa; es decir, si hace mal o hace bien, no se da una correlación con los resultados, haga lo que haga, el Gobierno saca una aprobación muy baja", expresó.
A juicio de Larraín, en el país "se ha instalado casi un prejuicio que hace que el Gobierno sea mal evaluado", y en tal medida, "el Gobierno debería en algún minuto decir: 'No voy a seguir mirando las encuestas', no en el sentido de no oír a la gente, sino de que -como haga lo que haga le va mal- prescinda de ese instrumento y se dedique a hacer un muy buen Gobierno, con mucha humildad, mucha sencillez, porque de lo contrario va a vivir preso de la angustia, de la ansiedad de lo que pasa con las encuestas sin ningún resultado".
"Cuando la gente advierta que aquí no hay ningún cálculo, ningún interés, doble intención en lo que se hace, puede cambiar el juicio ciudadano", reflexionó.
"Queda poco tiempo"El ex timonel UDI advirtió que al Ejecutivo liderado por Sebastián Piñera "le queda poco tiempo", y por ello "lo que tiene que hacer es seguir impulsando su programa de Gobierno" con decisión y dejar de oscilar en sus actuaciones, precisamente, por la influencia de los sondeos de opinión.
Durante sus dos años en el poder, "el Gobierno ha cambiado su manera de actuar a partir de los resultados: de repente el Presidente está muy presente en las cosas y de repente no lo está, de repente los ministros llevan el pandero -algunos ministros- y luego no; entonces se han probado distintas estrategias y todos los caminos que se han seguido no han modificado sustancialmente el resultado ciudadano" de respaldo.
Esto redunda en errores como "en el caso del movimiento estudiantil, donde en un minuto aparecía más preocupado del orden público que del tema que planteaban los estudiantes: el debate era si podían o no desfilar por la Alameda y no cómo mejorábamos la calidad de la educación, y eso obviamente hacía que la opinión pública tuviera un juicio".
Larraín reconoció que al interior de su sector "algunas personas se molestan, porque no estoy todo el día aplaudiendo al Gobierno", porque hace presentes los "errores de distinta naturaleza" del Ejecutivo, pero es justo "eso lo que me da la autoridad para poder hablar con una cierta objetividad hasta donde puedo, porque éste es 'mi Gobierno'", enfatizó.