Defensor del caso bombas: La supuesta querella de Hinzpeter me tiene sin cuidado

"Tranquilo" se declaró el abogado Rodrigo Román, defensor en el llamado caso bombas, ante los dichos del ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, quien este martes dijo que no descartaba presentar acciones judiciales contra los abogados y parlamentarios de oposición que lo han acusado de participar en un "montaje" en esta causa.

"Me tiene absolutamente sin cuidado, es absolutamente infundado. Esto es un discurso político, la reacción natural de un personaje que está cuestionado -no por esta defensa, sino que por la ciudadanía en general- a propósito del papel que ha desempeñado en la lucha contra el crimen", dijo Román a Una Nueva Mañana.

"Tal cual lo dice el ministro, 'todo tiene un límite', y el derecho penal también tiene un límite: no puede ser instrumentalizado por el poder político. En consecuencia, que él emprendiera posibles acciones judiciales sería tanto o más infundado que la acción judicial que se emprendió en agosto de 2010, cuando se formalizó por asociación ilícita terrorista; sería tanto o más infundado que la acusación del mismo caso", manifestó Román.

El profesional aseguró que él no ha "injuriado ni calumniado al ministro", pero sí "sostenido con vehemencia que el poder político tiene una participación importante en el caso bombas, y eso ha quedado al descubierto con las reuniones previas que tuvo el ministro Hinzpeter con el otrora fiscal Peña; él personalmente, no los abogados del Ministerio del Interior".

Intentos de "instalar" la idea de terrorismoEl abogado fue enfático en su condena al actuar de Hinzpeter tanto en este caso como en otros similares a partir de los cuales -afirmó- el Gobierno de Sebastián Piñera ha intentado "instalar" la idea de que en Chile hay terrorismo.

"El año 2010 hubo al menos tres episodios que comprometen al poder político con la instalación del supuesto terrorismo en Chile: en mayo de 2010 está el caso del ciudadano paquistaní, que se cayó rápidamente; en agosto de 2010 está el caso bombas -que terminó de caerse el viernes recién pasado-, y en octubre de 2010, el mismo año, hubo otra operación política que sindicaba al ciudadano chileno Manuel Olate con vínculos con las FARC, del terrorismo colombiano", recordó.

"Esos tres episodios, que coincidentemente se producen a partir de la instalación de nuevo Gobierno, tenían como propósito introducir en Chile un fenómeno que afortunadamente no existe, cual es el terrorismo", argumentó Román.

En consecuencia, y de cara a los futuros procesos penales que puedan emerger del caso bombas "la tranquilidad nosotros la tenemos, y la intranquilidad la tiene el ministro", concluyó el defensor.