Cónsul en Haití estuvo con sargento asesinado en bar "no recomendable"
Esto, según una calificación de la ONU a lugares en Haití.
Según el diplomático tomaron bebidas y luego él se fue, mientras el militar se quedó.
Guillermo Arévalo fue baleado en la madrugada del pasado 17 de junio.
El cónsul chileno en Puerto Príncipe, Diego Rivera, reveló que compartió con el sargento de la Armada Guillermo Arévalo durante la noche en que el militar fue asesinado, señalando que ambos compartieron una bebida en un bar calificado como "no recomendable".
El funcionario diplomático contó que se juntó cerca de la medianoche al sargento Arévalo y otro amigo en el bar Jet Set, que según la calificación de la ONU está en la categoría de "no recomendable" -de la escala "prohibido", "no recomendable" y "normal"- donde compartieron hasta pasadas las 02:30 de la madrugada.
En entrevista con El Mercurio, Rivera relató que en el lugar, que queda en un barrio que se caracteriza por el comercio sexual, "nos sentamos en una mesa, y me acuerdo que yo invité la primera ronda. Tomé Seven Up, Guillermo también, porque tenía que trabajar al otro día, y Marcelo tomó una cerveza. Estuvimos conversando de la vida; nos reíamos un rato; nos reíamos mucho, como en un club de Tobi".
Cerca de las tres de la madrugada Rivera y su amigo decidieron cambiar de sitio y partieron al pub Barak, ubicado a cuatro cuadras y categorizado como "prohibido" por la ONU. Arévalo y otro militar se quedaron en el local en que habían partido la noche.
"Me dijo 'yo me voy a ir en un ratito más, porque voy a bailar tres temas antes de irme a acostar para dormir relajadito'", afirmó del cónsul. Después Arévalo llamó al sargento de Carabineros Jorge Oyarzo, quien trabaja en la seguridad de la embajada en Haití.
Luego ambos uniformados se habrían visto envueltos en una pelea con un proxeneta que terminó con Arévalo asesinado a balazos mientras el carabinero resultó herido.
El cónsul afirmó que cerca de las cuatro de la madrugada se fue a la pensión donde residen los funcionarios chilenos y salió a comprar hot dogs, cuando se dio cuenta de lo que había ocurrido y llevó a Arévalo al Hospital Lambert Sante. Sin embargo, versiones de otros testigos afirman que Rivera siempre estuvo con el sargento asesinado.
El embajador de Chile en Honduras, Rodrigo Pérez, fue destinado como embajador especial para investigar lo ocurrido con el militar chileno en Puerto Príncipe.
La calificación de la ONU
Mariano Fernández, representante especial del secretario general de la ONU en Haití, explicó en Una Nueva Mañana en Cooperativa que "una misión de paz tiene reglas extremadamente esctrictas en su comportamiento que no tiene nada que ver con el comportamiento que una embajada autorice o no para sus funcionarios. La Misión de Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (Minustah) no tiene ninguna competencia con el cónsul de Chile ni con el sargento Arévalo".
El diplomático explicó que la calificación de la ONU a los locales rige solo para quienes representan a este organismo: "Para la Minustah el bar que estaba cerca de donde murió Arévalo es un bar prohibido. Para los funcionarios de la Minustah. No tiene nada que ver con el público en general ni con representantes diplomáticos. Es prohibido porque la Minustah tiene restricciones muy grandes. Es una cuestión de seguridad".