La polémica por errores del alcotest llega al Congreso
"Citaremos al ministro de Transportes, la directora del Senda, a Carabineros y a expertos", anunció el UDI Gustavo Hasbún.
La Policía descartó defectos del material utilizado en la medición.
La Comisión de Transportes de la Cámara de Diputados decidió involucrarse en la polémica que abrió el juez Patricio Souza al cuestionar la fidelidad de los exámenes de alcotest aplicados por Carabineros, que han registrado una serie de mediciones inusitadamente altas en la última semana: 3,39 gramos de alcohol por litro de sangre en el caso de la actriz Daniela Ramírez, 4,8 por el abogado Jorge Femenías y 5,0 por el ex futbolista Manuel Neira.
"Vamos a citar para la próxima semana al ministro de Transportes (Pedro Errázuriz), a la directora del Senda (Francisca Florenzano), a Carabineros y a algunos especialistas en la materia", anunció el presidente de la Comisión, el diputado UDI Gustavo Hasbún, que aludió especialmente al caso de Daniela Ramírez, cuya alcoholemia reveló sólo 1,6 gramos de alcohol por litro de sangre, menos de la mitad de lo que marcó el alcotest.
"A nosotros nos parece que se debe discutir, se debe debatir e investigar si efectivamente es un problema de que están mal calibrados (los aparatos que se utilizan) o la mantención no es la adecuada para los alcotest y fue un tema puntual, o si a lo mejor lo que se ha implementado en Chile no es la tecnología adecuada y eso genera más margen de error", planteó Hasbún.
La posibilidad de problemas en los implementos fue descartada de plano por el coronel Víctor Cancino, de la Prefectura de Tránsito de Carabineros: "Están funcionando en perfectas condiciones. Nuestra institución nunca va a utilizar instrumental que esté en malas condiciones", declaró.
"Carabineros está avalado para efectuar estos exámenes de acuerdo a la Ley de Tránsito, que en su artículo 82 dice que Carabineros podrá someter a controles a través de instrumentos debidamente validados, certificados, a conductores con el propósito de detectar sus condiciones etílicas. Descarto, en consecuencia, que estén funcionando en malas condiciones", añadió Cancino, que consideró que esta polémica "bajo ningún aspecto pone en cuestión la credibilidad de nuestra institución".
"Estos equipamientos están debidamente certificados y calibrados. Hay una calibración periódica y programada de todo este instrumental", dijo el oficial, que indicó que la diferencia en los valores arrojados por el alcotest y la alcoholemia puede obedecer a diferentes factores: "Uno de los motivos de esta variabilidad puede ser el tiempo que demanda entre el examen que realiza Carabineros y la alcoholemia, y lo otro está en que cada ser humano elimina el alcohol de distinta manera", dijo.
Entre el primer y el segundo examen pueden transcurrir de 30 minutos hasta dos horas; lapso en el que se puede redcir hasta en 1 gramo por litro de sangre el valor detectado.
"Hay que entender que entre que se hace el alcotest y se hace el examen de sangre transcurre un tiempo. Por eso, el cuerpo ha quemado el alcohol o parte de éste", expresó en la misma línea el ministro de Justicia, Teodoro Ribera.
"Ella puede mantener una opinión, estimar que los mecanismos empleados son los adecuados, pero un juez debe investigar, tiene que determinar con exactitud cuál es el grado de alcohol que tenía el imputado al momento de ir conduciendo", dijo el magistrado.