Tres tibetanos se prendieron fuego en un día y suman 22 en tres semanas
Las protestas contra el régimen comunista se han incrementado en el último mes.
Éste ha aumentado, a su vez, la represión contra el territorio ocupado.
Tres jóvenes tibetanos se prendieron fuego en un sólo día en distintas provincias del oeste de China en protesta por la "opresión" que sufren por parte del régimen comunista, y en demanda de la independencia del Tíbet y el retorno de su exiliado líder espiritual, el Dalai Lama.
Los últimos tres casos elevan a 22 la cifra de intentos de inmolación registrados en los últimos 20 días, más de uno por día, y a 85 en los dos últimos años, informa la agencia tibetana en el exilio Phayul.
El primero de los últimos casos fue protagonizado por un estudiante tibetano llamado Wangyal, de unos 20 años, y que se quemó a lo bonzo en Sichuan -limítrofe con la región autónoma del Tíbet- por la mañana.
A este incidente le sucedieron las inmolaciones de Gonpo Tsering, de 24 años y padre de tres niños, y de Kunchok Tsering, de 18, ambos en la provincia occidental de Gansu, en el noroeste de China.
Estos dos últimos tibetanos perecieron a causa de las graves quemaduras, y de momento se desconoce el estado del joven Wangyal, a quien se llevaron las autoridades comunistas minutos después de que se prendiera fuego y tras apagar las llamas que cubrían su cuerpo.
Varios militares se desplazaron al lugar de los hechos, tanto en Gansu como en Sichuan, inmediatamente después de producirse las protestas suicidas, según Phayul, que cita una fuente tibetana en el exilio con contactos en la región.
"Las autoridades chinas han incrementado las restricciones de la población en la región, en base a la apertura de una investigación de lo ocurrido", señala la citada fuente.
Aumenta la represión
La organización Free Tibet informó hoy de que más de veinte estudiantes tibetanos fueron hospitalizados tras enfrentarse con la policía durante unas protestas que congregaron a alrededor de mil personas en la provincia de Qinghai, situada entre las dos en las que se produjeron las inmolaciones y también habitada por la etnia.
Los jóvenes, en su mayoría estudiantes de la escuela Sorig Lobling, en el condado de Chabcha, salieron el lunes a la calle en respuesta a la publicación de un libro por parte de las autoridades chinas que criticaba con crudeza las inmolaciones y menospreciaba el lenguaje tibetano.
La tensión ha recrudecido en los últimos 20 días, desde que se celebró en Pekín el XVIII Congreso del Partido Comunista (PCCh), en el que se eligió a los líderes que gobernarán el país durante la próxima década.
Según Free Tibet, la policía cerró la escuela de la que salieron los manifestantes y prohibió a los padres de los veinte estudiantes hospitalizados -al menos cuatro de ellos con necesidad de un tratamiento de urgencia- que los visiten a sus hijos.
China considera al Tíbet parte del país desde hace siglos, por uniones dinásticas y conquistas en la época imperial, si bien para los tibetanos en el exilio el "Techo del Mundo" era virtualmente independiente hasta que fue ocupado por el Ejército comunista a principios de la década de los 50 del siglo pasado.