Sacerdote defendió la importancia del convenio OIT para el pueblo indígena
Carlos Bresciani apuntó a que éste "no se está aplicando" en el país.
"Hay que abordar el tema más de fondo", puntualizó.
Tras las quejas del mundo empresarial sobre el acuerdo de la OIT que establece en su artículo 169 las garantías de los pueblos originarios a ser consultados sobre proyectos que los afecten, el sacerdote jesuita Carlos Bresciani enfatizó la importancia del documento, defendió a los indígenas y negó su participación en reuniones consultivas sobre proyectos ambientales.
En entrevista con El Diario de Cooperativa, el sacerdote expresó que "si se piensa lo del convenio 169 desde las perspectivas económicas, ciertamente estamos perdidos. Creo que se debe pensar desde la perspectiva de los Derechos Humanos de los indígenas, ya que es un bien común para todo el país", apuntó y señaló que el acuerdo firmado por el Estado de Chile "debiera comenzar a implementarse en las comunidades y en el país en general".
Sin embargó, "el convenio 169 siento yo que no se está aplicando y que solo se aplica cuando hay abogados defendiendo intereses de comunidades o de personas de comunidades en ciertos litigios concretos relacionados a forestales o a ciertas empresas que está participando en el territorio", dijo Bresciani.
"Pero no hay una estructura orgánica que esté haciendo el esfuerzo por hacer o reconstruir legalmente el convenio 169 en las comunidades", las cuales "viven su proceso de autonomía y de autodeterminación en su propio caminar".
Un supuesto documentó que generó "confusión"
Además, ante un supuesto documento del Gobierno que indicó que el sacerdote habría participado en una de las reuniones sobre las consultas del Reglamento de Evaluación Ambiental para proyectos de inversión, Bresaciani indicó que "fui invitado a una de estas reuniones, pero no pude asistir".
"Parece que ha habido una confusión en términos de si se nombró o no como si estuviera participando, o fue alguien que mencionó esto tratando de hacer confusión entre la gente", puntualizó el religioso, quien negó participar en cualquier tipo de junta sobre el tema.
Tras esto, "yo mandé mi molestia a las personas de Gobierno que me han respondido en las últimas horas y me han dicho que no me han nombrado ellos como avalando este proyecto (...) según lo que dicen ellos, hubo alguna abogada en la reunión que generó esta confusión".
Además, recalcó la importancia de que el relator de las Naciones Unidas, James Anaya, participara como asesor para aclara los tipos de reuniones. "Ahí está la clave para realizar un buen proyecto de consulta", sostuvo.
"Hay que abordar el tema más de fondo, que es cómo queremos realizar, como país, una verdadera consulta sobre el modo de cómo las comunidades quieren abordar las diferentes temáticas que le afectan", sostuvo Bresciani.