Contagios de Sida bajan más del 25 por ciento en Haití
Así lo afirmó este sábado el director de Onusida, Michel Sidibé.
Además, el país redujo en más de un 50 por ciento el número de niños que nacen con el síndrome.
El director ejecutivo de Onusida, Michel Sidibé, reveló este sábado que los nuevos casos de infecciones de Sida se redujeron en más de un 25 por ciento en Haití, según los últimos datos del organismo.
El país mantuvo la lucha contra la enfermedad "dentro de sus prioridades" y forma parte de "los países que pudieron controlar la epidemia", afirmó Sidibé, si bien invitó a no olvidar los desafíos en el combate a la enfermedad, aunque reconoció que "Haití ".
El alto funcionario hizo estas declaraciones en una conferencia de prensa en Puerto Príncipe junto a la ministra de salud, Florence Duperval Guillaume, con motivo de una ceremonia conmemorativa del Día Mundial de la Lucha Contra el Sida.
También indicó que Haití pudo aumentar "de manera considerable" el número de personas que se benefician de tratamiento, tras recordar que "hace 10 años no había nadie bajo tratamiento (bajo el programa nacional). Hoy hay más de 35.000 personas", enfatizó.
Indicó que durante los últimos cuatro años se ha reducido en más de un 50 por ciento el número de niños que nacen con el sida, a pesar de que actualmente en Haití nacen dos niños cada día con el virus.
"Tengo confianza en que, con el compromiso de las autoridades y de los actores en la lucha contra el sida, se podrá, eventualmente en 2015, decir que no existen niños que nacen con el sida" en Haití.
Desafíos
El director ejecutivo de Onusida, por otra parte, mencionó varios desafíos en la lucha contra la enfermedad en Haití y a través del mundo, como la dependencia económica, lo caro de los tratamientos y la exclusión social.
"Hay que romper el círculo vicioso de la dependencia" dijo, y propuso "salir de la lógica de la caridad e ir a una lógica de responsabilidad compartida", dijo.
Agregó que "la caridad es importante en un momento, pero no permite mantener a nuestros enfermos bajo tratamiento y hacer perennes nuestros programas", por lo que abogó por servicios comunitarios de salud para bajar los costos de los tratamientos de la enfermedad.
El alto funcionario estimó finalmente que "no se puede ganar la lucha contra el sida sin ser inclusivo, sin proteger a las minorías", haciendo referencia a los homosexuales y a las trabajadoras del sexo, que no deben ser obligados a "esconderse", puesto que tal actitud dificulta el tratamiento de la enfermedad.