Integrante de Pussy Riot fue ingresada a celda de castigo
Fue castigada por levantarse 20 minutos tarde.
Estaría siendo sometida a una "reeducación" para su adaptación a la prisión.
Una de las dos integrantes del grupo punk ruso Pussy Riot, María Aliójina, ha sido ingresada en una celda de castigo para su "reeducación", durante su condena de dos años de prisión por actuar en la catedral de Cristo Salvador.
Aliójina, de 24 años, fue castigada esta semana por levantarse en una ocasión con 20 minutos de retraso, uno de los más habituales motivos de sanción en prisión.
"La condenada Aliójina está siendo sometida a un trabajo individual de reeducación para su adaptación al colectivo", informó este viernes un portavoz de los servicios penitenciarios en la región de Perm (Urales).
Agregó que "el grupo en el que ha sido integrada la chica existe un clima psicológico normal, sin embargo ella se encuentra en un lugar seguro en el territorio de la celda de castigo".
La joven, que comenzó recientemente un curso de confección en el taller de la penitenciaría 32, puede ver retirado el castigo por medio de su trabajo.
Los abogados de la joven —que tiene un hijo de 5 años— aseguraron que recurrirán la sanción carcelaria, ya que puede impedir que salga de la cárcel de antemano por el hecho de ser madre de un menor de edad.
Tanto Aliójina, como Nadezhda Tolokónnikova, que ha sido ingresada en una prisión de la república de Mordovia, habían solicitado cumplir sus penas en la región de Moscú para poder estar más cerca de sus hijos.
Tolokónnikova y Aliójina mantienen su inocencia e insisten en que su acción de febrero pasado en el principal templo ortodoxo del país tenía fines políticos y no estaba dirigida contra los creyentes ortodoxos. Por su parte, la tercera integrante, Yekaterina Samutsévich, se encuentra en libertad y espera que el grupo siga activo.