Potencias mundiales rechazaron tratado que intenta controlar internet
La conferencia de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) intenta establecer normas que regulen la red.
Estados Unidos, Canadá y gran parte de Europa occidental rechazaron la iniciativa.
En el penúltimo día de realización de la conferencia de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), organizada por la ONU y que se llevó a cabo desde el pasado 3 de diciembre en Dubai, diversos países declararon su rechazo a establecer una política mundial para la vigilancia de los gobiernos sobre Internet.
La iniciativa, que tiene por finalidad establecer normas que supervisen la red a través de la creación y aceptación de un nuevo tratado que rija las comunicaciones internacionales y el cual estaría a cargo de las Naciones Unidas, no tuvo el éxito esperado en su fase final, ya que diversos delegados de países occidentales rechazaron las modificaciones que se le implementaron al actual reglamento debido a que temen que los Estados Arabes y Rusia puedan controlar Internet.
De esta forma, en el penúltimo día de la conferencia, realizado el jueves, entre los países que no firmaron el decreto se encuentra la mayoría de las naciones de Europa occidental junto con Estados Unidos, Canadá, Filipinas, Polonia, Egipto, Kenya y la República Checa.
A pesar de la abstención de voto de varios delegados de algunas de las economías más grandes del mundo, el Secretario General de la UIT , Hamadoun Touré, aseguró que la iniciativa ha tenido éxito: "Ha logrado atraer una atención pública sin precedentes ante las perspectivas diferentes e importantes que rigen las comunicaciones globales".
La visión del experto
Según la investigadora del programa Libertad de Expresión y Ciudadadanía del Instituto de la Comunicación e Imagen de la Universidad de Chile, Patricia Peña, en términos simples esta regulación buscaría "meterse o entrarse en lo que se llama la gobernanza de Internet, es decir cómo se puede, de alguna manera, regularizar ciertos procesos. Muy relacionados con esto, tiene que ver con garantizar la neutralidad en la red, de esta plataforma que hasta ahora se ha entendido como una plataforma de comunicación e intermcomunicación libre, horizontal".
Por ende, el rechazo a esta "política" busca principalmente "mantener la idea de Internet libre. Libre de regulaciones que impliquen cibercensura o que se adentren a temas que tengan que ver con contenidos y libertad de expresión, que significa, por ejemplo, monitorear redes".
Además, añadió Peña, el conflicto radica en "por qué finalmente un organismo, que tiene que ver con la regulación del sector de las telecomunicaciones, deba regular lo que es Internet, cuando Internet es mucho más que un servicio de telecomunicaciones".
Resolución del conflicto
Este viernes se realizará la clausura de la conferencia, en cuya oportunidad los otros países miembros tendrán la posibilidad de votar en favor o en contra del tratado que intenta controlar Internet.
Para algunos, aunque muchos de los delegados que participen este viernes voten a favor de la iniciativa, es difícil que la reforma al tratado sea aceptada debido al rechazo de gran parte de las potencias mundiales.