Senador UDI: La renuncia de Ribera es beneficiosa para la fe pública
"La crisis de la educación hace que no se resista un conflicto de interés", dijo Hernán Larraín.
Su par DC Jorge Pizarro dijo que el ex ministro incurrió "derechamente en tráfico de influencias".
Reacciones inmediatas del mundo político generó la renuncia a su cargo, la mañana de este lunes, del ministro de Justicia, Teodoro Ribera, en el marco del escándalo por las acreditaciones y su participación en sociedades relacionadas a la Universidad Autónoma, de la cual fue rector.
El senador de la UDI Hernán Larraín, que ha sido una de las voces más críticas del oficialismo ante lo ocurrido en la Comisión Nacional de Acreditación, dijo a Cooperativa que dado todo lo que ocurrió en la última semana la dimisión de Ribera "al final era algo de esperar".
"La crisis que atraviesa la educación superior hace que no se resista un conflicto de interés. Al final, al ministro Teodoro Ribera -que ha sido muy claro en sus temas, aunque se haya equivocado en algunas declaraciones- lo afectó una situación de conflicto de interés que no resistía más", añadió Larraín.
"Creo yo que eso es lo único positivo que tiene este cuadro: que la transparencia está operando de una manera muy beneficiosa para la fe pública en la administración de Estado", sentenció el ex presidente de la UDI.
El actual timonel gremialista, Patricio Melero, comentó en el Palacio de La Moneda que la dimisión de Ribera "está en la esfera de lo político, de lo prudencial".
El "conjunto de declaraciones y de hechos" denunciados hacían "difícil a Teodoro Ribera poder seguir encabezando el Ministerio de Justicia", agregó el diputado, que insistió en que en esta decisión pesan "elementos políticos y prudenciales, no hechos irregulares ni ilícitos".
"Son los presidentes de la República los que evalúan la tarea de los ministros. Él ha tomado una decisión y yo comparto, desde luego, que en virtud de los elementos políticos y prudenciales que habían, haya aceptado la renuncia", añadió Melero insistiendo en el mismo concepto.
Espina: No era necesaria la renuncia
Desde RN, el senador Alberto Espina consideró que, pese a las acusaciones, no era necesario que Ribera renunciara en virtud de los antecedentes conocidos.
"Yo creo que cuando una persona ha actuado correctamente, en forma absolutamente de acuerdo a lo que ha sido su leal saber y entender, podría perfectamente continuar en el cargo, pero en este caso hay una decisión del Presidente", dijo el legislador.
"Creo que Teodoro Ribera fue un gran ministro de Justicia, y nosotros tenemos absolutamente claro que él se va a concentrar en demostrar no sólo que no ha cometido ningún hecho irregular, sino que, además, su conducta ha sido la adecuada en esta materia", indicó.
DC: Hay tráfico de influencias
La salida de Ribera del Gobierno fue celebrada, en cambio, por Jorge Pizarro, jefe del comité de senadores de la DC.
"La situación era insostenible. Mientras más se explicaba más se complicaba Ribera", dijo Pizarro a Cooperativa.
"Aparecía nueva información que lo colocaba en una situación derechamente de tráfico de influencias, y frente a un problema de ese tipo el Gobierno no puede asumir la falta de credibilidad y de confianza que se genera entre la opinión pública", opinó.
"Ojalá esto ayude a que este Gobierno termine con el permanente conflicto de intereses que tienen quienes cumplen altas funciones, quienes tienen la autoridad y la obligación de dirigir ministerios o formar parte del más alto nivel del Gobierno, con los negocios o las actividades particulares", concluyó.