Supremo de EE.UU. estudia constitucionalidad del matrimonio gay en California
La que se analizará es la Propuesta 8, enmienda que prohibió estas bodas en 2008.
Los jueces también pueden decidir que su veredicto no se limite a California.
El Gobierno de Barack Obama pidió a finales de febrero al Supremo que declare inconstitucional la Propuesta 8.
El Tribunal Supremo de EE.UU. escucha este martes los argumentos a favor y en contra de la Propuesta 8, la enmienda constitucional que impide el matrimonio gay en California, en un caso que podría tener consecuencias en otros estados del país.
Los nueve magistrados de la máxima instancia judicial del país se dedicarán al primero de los dos casos centrados en las uniones entre personas del mismo sexo que analizarán este año, y sobre los que se espera que decidan el próximo junio.
El caso se refiere a la enmienda que prohibió los matrimonios homosexuales en California en 2008, apenas seis meses después de que el Estado los legalizara, y que cerró la posibilidad de casarse a las dos parejas que iniciaron la demanda: las lesbianas Kristin Perry y Sandra Stier, y los homosexuales Paul Katami y Jeffrey Zarrillo.
En 2010 un tribunal federal declaró inconstitucional la enmienda, y una corte de apelaciones ratificó ese fallo en 2012, por lo que los defensores de la Propuesta 8 decidieron el pasado julio llevar el caso ante el Supremo.
Las opciones
En caso de que la máxima corte dé la razón al tribunal de apelaciones, el matrimonio gay volverá a ser legal en California.
Pero los jueces también pueden decidir que su veredicto no se limite a California, sino que se extienda también a todos los estatutos y enmiendas constitucionales estatales que prohíben el matrimonio gay, algo que ocurre en 30 Estados.
Otra opción es que decidan que su veredicto se aplique sólo a California y a los otros nueve Estados que permiten algún tipo de unión legal entre parejas homosexuales -Delaware, Hawai, Illinois, Nueva Jersey, Rhode Island, Nevada, Colorado, Oregón y Wisconsin, a los que podría forzar a calificar esas uniones como matrimonio.
El Gobierno de Barack Obama pidió a finales de febrero al Supremo que declare inconstitucional la Propuesta 8, a través de una opinión legal enviada por el Departamento de Justicia, y a esa posición se han sumado unas 200 empresas estadounidenses y decenas de líderes republicanos.
La sesión de hoy durará una hora, dividida en 30 minutos para cada una de las partes, que comenzarán con media hora de argumentos a favor de la Propuesta 8 por parte de Charles Cooper, el abogado de los defensores de la enmienda.
A continuación intervendrá durante 20 minutos el representante de Perry, Theodore B. Olson, seguido de diez minutos para el abogado que representa al Gobierno de Obama ante el Supremo, Donald Verrilli.
El miércoles, el Supremo se dedicará al otro caso relacionado con las bodas gais, el que reta la Ley de Defensa del Matrimonio (DOMA, por su sigla en inglés), que define el matrimonio como la "unión entre un hombre y una mujer" e impide, por tanto, que los homosexuales casados en los nueve Estados donde es legal logren reconocimiento y beneficios fiscales a nivel federal.