Los funerales de Margaret Thatcher en Inglaterra
El primer ministro, David Cameron, pidió a sus críticos que muestren "respeto" durante la ceremonia.
La ex gobernante es vista, por sus opositores, como una política que dividió al Reino Unido.
Miles de británicos se han reunido para protestar por el trato honorífico hacia la figura de Thatcher durante su funeral.
La solemnidad marcó el funeral de la ex primera ministra británica conservadora Margaret Thatcher, en el que el obispo de Londres, Richard Chartres, pidió dejar a un lado la controversia que ha rodeado su vida política.
En presencia de la reina Isabel II y más de 2.000 invitados, Chartres se dirigió a la congregación reunida en la catedral de San Pablo, en Londres, para dar el último adiós a la "Dama de Hierro", en una ceremonia que puso fin a los homenajes en su memoria.
Durante el acto religioso y frente al ataúd situado en la nave central del templo cubierto con la bandera británica, la nieta de la exmandataria, Amanda Thatcher, y el primer ministro británico, el también conservador David Cameron, leyeron pasajes de la Biblia antes de que se escuchara música barroca de órgano de Henry Purcell.
En su intervención, Chartres recordó la vida de Thatcher desde sus comienzos como estudiante de Química hasta su llegada al poder en 1979 pero pidió, sobre todo, dejar a un lado la controversia que rodea su legado político para concentrarse en la persona "sujeta al destino común del ser humano".
"Después de la tormenta de una vida rodeada por la controversia política, hay una gran calma", admitió el obispo, y recordó que el debate sobre sus políticas debe ser en el Parlamento porque "hoy y aquí, no es ni el momento ni el lugar" para hacerlo.
Thatcher aún despierta las pasiones más encontradas, entre los que admiran su gestión de Gobierno (1979-90) hasta los que recelan de sus políticas que hicieron sufrir a mucha gente.
Con toda la pompa y la solemnidad que marca el protocolo, el cortejo fúnebre comenzó el recorrido por las principales arterias de Londres en la iglesia de Saint Clement Danes de la Real Fuerza Aérea, en la avenida de Strand, entre fuertes medidas de seguridad.
El ataúd, cubierto con la bandera británica y un ramo de rosas blancas, fue transportado en un armón de artillería tirado por seis caballos y escoltado por miembros de las tres fuerzas armadas, entre ellos de los regimientos que participaron en la guerra de las Malvinas contra Argentina de 1982.
Durante todo el recorrido el público se agolpó tras verjas de protección, muchos de ellos con banderas británicas, y se escucharon aplausos al inicio y llegada del cortejo fúnebre, mientras el Big Ben enmudeció en señal de respeto del Parlamento.
Defensa de las exequias
El primer ministro británico, David Cameron, defendió la solemnidad que rodeará el funeral de la ex jefa de Gobierno Margaret Thatcher y pidió a sus críticos que muestren "respeto" durante la celebración.
En declaraciones a Radio 4 de la cadena BBC, Cameron justificó los honores que recibirá Thatcher por considerar que es un "tributo adecuado" para una gran figura nacional.
El funeral ha sido criticado por varios diputados, debido a que Thatcher es vista como una política que dividió al Reino Unido, en contraste con Winston Churchill, que es considerado una figura muy respetada por su importante papel en la Segunda Guerra Mundial.
Thatcher, que ejerció el poder entre 1979 y 1990, murió el 8 de abril pasado de un ataque cerebral a los 87 años, pero la solemnidad que tendrá su funeral ha provocado gran polémica.