India investiga la venta de un bebé tres veces en diez días
El pequeño fue secuestrado desde el hospital donde nació.
El abuelo materno le dijo a su hija que había muerto.
La Comisión de Derechos Humanos de la India (NHRC) investiga el caso de un bebé que fue vendido tres veces en diez días, la última de ellas a través de Facebook, informó una fuente oficial.
"Hemos pedido informes a los comisarios de Policía de Ludhiana y Nueva Delhi para que expliquen cómo es posible que el niño fuese secuestrado en el hospital" en el que nació, dijo Jaimini Kumar Srhivastava, portavoz de la Comisión.
El organismo estatal de derechos humanos ha solicitado también un informe al Ministerio de la Mujer y Desarrollo de la Infancia.
El bebé nació el 3 de abril en un centro médico privado en Ludhiana, en el norteño estado del Punjab, y el abuelo materno le dijo a su hija que había muerto.
Una semana más tarde el abuelo vendió al recién nacido por 45.000 rupias (cerca de 395 mil pesos) y una botella de licor a una enfermera del hospital, de acuerdo con la prensa local.
El niño fue vendido más tarde a un asistente de laboratorio por 300.000 rupias (más de 2,6 millones de pesos), quien lo revendió a su vez a un empresario de Nueva Delhi por 800.000 (más de 7 millones de pesos), con quien se comunicó través de Facebook.
La investigación
La Policía tardó dos semanas en registrar la denuncia de la madre, que sospechó sobre la nueva riqueza de su padre.
Finalmente, las fuerzas de seguridad detuvieron al abuelo del niño y a las otras tres personas implicadas el 24 de abril.
El bebé se encuentra de vuelta con su madre.
Según las investigaciones preliminares policiales, el abuelo reveló que quería que su hija, que fue abandonada por su marido, se casase de nuevo y el bebé suponía un impedimento para ello.
"Así que pensó que se desharía del niño del primer matrimonio de su hija vendiéndolo", explicó el comisario de Policía de Ludhiana Ishwar Singh al canal NDTV.
Un menor desaparece en la India cada ocho minutos, lo que en 2011 supuso alrededor de 60.000 niños, de los cuales unos 22.000 nunca fueron encontrados, víctimas de redes de tráfico de menores, según cifras del Gobierno.