Fiscalía levantó secreto bancario de Alan García para indagar presunto enriquecimiento
La decisión se basó en que el ex presidente no pudo clarificar sus ingresos.
El ex mandatario quería comprar una casa de 830.000 dólares en el distrito de Miraflores.
El ex mandatario peruano no pudo explicar claramente el origen de ciertos dineros.
La Fiscalía de la Nación ordenó levantar el secreto bancario y tributario del ex presidente peruano Alan García (1985-1990 y 2006-2011) para facilitar las investigaciones por presunto enriquecimiento ilícito, se informó este viernes en Lima.
La orden dictada por el fiscal de la Nación, José Peláez, responde a que García no fue lo suficientemente claro al explicar sus ingresos para sustentar la compra de una casa de 830.000 dólares en el distrito de Miraflores, en la ciudad de Lima, indicó la agencia estatal Andina y otros medios locales.
El pasado 5 de febrero, la Fiscalía abrió una investigación preliminar contra García por la presunta comisión del delito de enriquecimiento ilícito, luego de que se revelara que compró una casa por 830.000 dólares.
No estaría debidamente justificado
En la resolución que informó sobre el inicio de la investigación se mencionó que "se cuenta con datos que revelarían un incremento en el patrimonio" del ex gobernante y que existe el indicio de que el origen de los fondos empleados para la compra "no se encontraría debidamente justificado".
García ofreció una rueda de prensa en la que mostró documentos de los ingresos que obtuvo en los últimos 18 meses por un total de 3.352.000 soles (1.314.509 dólares).
El ex mandatario aseguró que ese dinero es producto de su trabajo "académico, intelectual y como escritor" y detalló que solo por una serie de conferencias que ha dado en todo el mundo ha percibido 2.120.000 soles (831.372 dólares).
El pedido del levantamiento del secreto bancario se realiza en medio de una investigación parlamentaria sobre la gestión de García, que según el exmandatario responde a los dictados de Palacio de Gobierno para preparar una hipotética "reelección conyugal", en alusión al supuesto interés de la esposa del actual presidente Ollanta Humala, Nadine Heredia, en suceder a su cónyuge en la presidencia de Perú en 2016.
De acuerdo a García, la comisión parlamentaria, dirigida por el oficialista Sergio Tejada, actúa siguiendo "condicionamientos políticos dictados desde Palacio de Gobierno para preparar otros planes electorales, que tengan que ver con sus aspiraciones y deseos".
Nadine Heredia, que legalmente está impedida de postular a la presidencia, tiene una aprobación popular de 60 % inclusive mayor a la de Humala y es considerada una persona de gran influencia en las decisiones políticas de su esposo.