Acusado de crimen de joven negro fue declarado "no culpable" en EE.UU.
George Zimmerman enfrentaba los cargos de asesinato en segundo grado y homicidio involuntario.
Ninguno de los testigos vio cómo se originó la reyerta.
El ex vigilante voluntario hispano George Zimmerman, de 29 años, fue declarado "no culpable" de los cargos de asesinato en segundo grado y homicidio involuntario que se le imputaban por la muerte en 2012 en Florida (EE.UU.) del adolescente negro desarmado Trayvon Martin.
Tras 16 horas de deliberaciones, el jurado, compuesto por seis mujeres, alcanzó el veredicto unánime de no culpable por ambos cargos y lo entregó por escrito a la jueza encargada del caso, Debra Nelson.
El jurado ha deliberado durante dos días y estudiado a fondo los dos cargos contra Zimmerman, para lo que pidieron a la jueza un listado con las pruebas numeradas y sus correspondientes descripciones que se han exhibido en este proceso judicial.
Zimmerman, de madre peruana, afrontaba una condena de cadena perpetua, en el caso de ser declarado culpable de asesinato en segundo grado, y de hasta treinta años de cárcel por el de homicidio involuntario.
Ninguno de los testigos que compareció en el juicio de casi cinco semanas vio cómo se originó la reyerta que acabó con la vida del muchacho negro estudiante de bachillerato en un colegio de la localidad de Miami Gardens, aledaña a Miami.
La Fiscalía había retratado a Zimmerman como alguien que "se creía un policía", que "se tomó la justicia por su mano", cuando vio a Martin caminando bajo la lluvia, y asumió que el chico "no era para nada bueno".
El fiscal Bernie de la Rionda describió a Martin como un "chico inocente de 17 años" a quien Zimmerman "identificó como un criminal", le persiguió, tras obviar la recomendación de la Policía, se enzarzó en una pelea con él y lo mató de un tiro a quemarropa "porque quiso".
Pero sobre las consideraciones y decisión final del jurado pesó más el relato de los hechos expuesto por la defensa de Zimmerman, que había defendido la inocencia de este con el argumento de que actuó en defensa propia y pedido la absolución de los cargos en su contra.
La versión de Zimmerman sobre su actuación en defensa propia se fundamentó en que Martin le pegó un puñetazo en la nariz, le empujó y, al caer al suelo, el muchacho se sentó a horcajadas sobre él y comenzó a golpearle y sacudir su cabeza contra el suelo, por lo que tuvo que dispararle.