Asesor explicó modalidad del censo abreviado propuesto al Gobierno
Osvaldo Larrañaga dijo en GPS que la diferencia es reducir al mínimo las preguntas.
No obstante, aseveró que la cobertura debe ser nacional y censar a toda la población.
La comisión propuso un censo abreviado para 2015.
El asesor de política social del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Osvaldo Larrañaga, quien además participó en la Comisión Externa por el Censo 2012, explicó la propuesta al Gobierno de realizar un censo abreviado en 2015.
En conversación con GPS, el experto sostuvo que la única diferencia con el proceso original es la reducción de preguntas al mínimo, pues su alcance debe ser nacional.
"La opinión que se hizo la comisión después de tres meses de trabajo bastante arduo fue que el Censo no cumplía con los objetivos mínimos que uno le pedía a este tipo de instrumentos y que por lo tanto nuestra recomendación era hacer un censo abreviado el 2015", dijo Larrañaga.
"Es un censo que contiene el mínimo de preguntas que requiere tener el censo, es abreviado en el número de preguntas, pero en el término de cobertura nacional, la idea es censar a toda la población del país", explicó.
Consultado sobre las causas que condujeron a los datos erróneos recolectados en la medición, Larrañaga indicó que se trató básicamente del cambio de modalidad de un censo de hecho a un censo de derecho con poco tiempo para esa implementación.
"Hubo un conjunto de factores todos de ellos adversos, pero a nuestro juicio el principal problema fue que el Censo, que son operaciones complejas en su logística, se venía planificando desde el año 2008 en la modalidad tradicional que hacíamos en el país de un censo de hecho, el cual se hace en un día con una gran cantidad de censistas", detalló.
Larrañaga añadió que "en agosto de 2011, siete u ocho meses antes de ir a levantar información a terreno, la dirección del INE decidió cambiar de metodología a un censo de derecho, que tiene una lógica distinta que permite que se haga en un periodo prolongado de tiempo, dos o tres meses", como fue el que se realizó en 2012.
Por ello "lo que no hubo fue el tiempo suficiente de preparación para el nuevo censo con la nueva metodología, lo que acarreó un montón de problemas que simplemente cuando estuvo la gente en terreno comenzó a colapsar en distintos aspectos", concluyó el experto.