La Pussy Riot Tolokónnikova quiere cumplir el resto de su condena en hospital
Está internada tras realizar una huelga de hambre para denunciar malos tratos.
Dos integrantes de la banda punk están prisioneras desde 2012.
Pussy Riot fueron encarceladas tras un intento de intervención artística contra Putin en una iglesia ortodoxa en Moscú.
Una de las encarceladas del grupo punk ruso Pussy Riot, Nadezhda Tolokónnikova, ingresada en una clínica de la región siberiana de Krasnoyarsk, querría cumplir los cien días de condena que le quedan en ese establecimiento sanitario, aseguró este miércoles su marido, Piotr Verzílov.
"Todavía no está claro cuánto tiempo permanecerá en el hospital ni si luego será trasladada a la prisión. Sigue contenta con el trato del personal del hospital y los cuidados que recibe. Dado que le quedan cien días de condena, Nadezhda no se opone a quedarse en el hospital durante ese periodo", dijo Verzílov a la agencia Interfax.
Tolokónnikova ingresó en el Hospital para Tuberculosos de Krasnoyarsk, en Siberia, la semana pasada, después de ser trasladada desde la prisión de la región de Mordovia en la que pasó la mayor parte de su condena a dos años de cárcel por "actitudes poco cívicas motivadas por odio religioso".
Tras un traslado en tren que duró 26 días para recorrer unos 4.000 kilómetros, desde la prisión de Mordovia en la que estaba desde octubre de 2012 y que incluyó estancias en varias prisiones de tránsito, la joven ingresó en el hospital para ser sometida a chequeos médicos.
Según Verzílov, la larga duración del traslado de su esposa fue una medida de castigo por sus denuncias de abusos en la prisión de Mordovia, que llevaron a Tolokónnikova a declarar una huelga de hambre en septiembre.
La Pussy Riot denunció en la prensa rusa amenazas de muerte por parte de compañeras de celda y la administración de la cárcel, y los abusos, los malos tratos y las torturas a los que son sometidas permanentemente las internas.
Apelación
Mientras, María Aliójina, la otra integrante del grupo punk encarcelada, siguió los pasos de Tolokónnikova y recurrió este martes ante el Tribunal Supremo de Rusia la sentencia condenatoria a dos años de prisión alegando numerosas irregularidades, según el jefe de la ONG de derechos humanos rusa "Ágora", Pavel Chíkov.
Tolokónnikova, Aliójina y Yekaterina Samutsévich, las tres integrantes de Pussy Riot -ésta última en libertad condicional desde octubre del año pasado- fueron condenadas tras escenificar en febrero de 2012 una plegaria "punk" en el principal templo ortodoxo ruso, en Moscú.
Las tres chicas mantienen su inocencia e insisten en que su acción en la catedral de Cristo Salvador de Moscú tenía fines políticos y no estaba dirigida contra los creyentes ortodoxos.