Sename y muerte de menor: No hubo advertencia alguna de la agresión

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Autor: Cooperativa.cl

El joven, de 17 años, falleció tras ser agredido al interior de un centro en Til Til.

La institución descartó cualquier tipo de denuncia previa de la víctima.

 Archivo UPI/Referencial

El joven, de iniciales D.V., falleció mientras era trasladado a un centro asistencial.

 La jefa del departamento de Justicia Juvenil del Servicio Nacional de Menores, Catherine Ríos, dijo que no hubo ningún tipo de advertencia que permitiera tomar medidas para evitar la agresión que le costó la vida a un menor, de 17 años, residente de un centro de la institución en la comuna de Til Til.

El adolescente, identificado con las iniciales D.V., fue agredido con un objeto cortopunzante al interior del centro y falleció mientras era trasladado al servicio de urgencia de Colina. 

"La información que nosotros tenemos, la información que nos han dado los interventores clínicos, que son los profesionales que trabajan con el chico, el encargado de caso y la gente que trabaja al interior de la casa con él (...) y no se había reportado ningún tipo de advertencia, denuncia, de que este chico hubiese recibido algún tipo de amenaza", afirmó Ríos.

La funcionaria del Sename manifestó que "habitualmente existen agresiones, dificultades entre los propios jóvenes, pero en este caso concreto nosotros no teníamos ningún antecedente que permitiera esbozar o presumir que él iba a ser víctima de algún tipo de agresión". 

"El tampoco había manifestado ni formal ni informalmente el que hubiese sido objeto de algún tipo de amenaza. Eso lo descartamos rotundamente porque de ser así se hubiesen podido tomar algunas medidas como separación de grupo o cambiar de casa", agregó la jefa del departamento de Justicia Juvenil.  

Lo dicho por Ríos contrasta con la versión entregada por el presidente regional de los funcionarios del Sename, Raúl Jeria, quien señaló que el menor había hecho una denuncia a la dirección del centro. 

La funcionaria del Sename también explicó que los agresores fueron segregados del resto de la comunidad por Gendarmería.