Un tercio de los estadounidenses no cree en la teoría de la evolución
El porcentaje es mayor entre los adherentes al Partido Republicano (48 por ciento).
Un 24% de quienes aceptan la tesis evolutiva le otorgan un rol importante a la acción divina.
Los protestantes evangélicos blancos son los que más rechazan las ideas de Charles Darwin.
Un tercio de los estadounidenses rechaza la teoría de la evolución de la especie humana y los simpatizantes del Partido Republicano creen en ella menos que hace cuatro años, según un estudio publicado por el centro de investigación Pew.
Según el sondeo, el 33 por ciento de los estadounidenses consultados aseguró que "los humanos y otros seres vivos han existido en su forma presente desde el comienzo de los tiempos", mientras el 60 por ciento se muestra de acuerdo con la idea de la evolución.
La proporción de quienes aceptan y rechazan la teoría es prácticamente igual a la registrada en 2009, cuando el centro Pew hizo el estudio por última vez.
Sin embargo, el porcentaje de republicanos que no creen en la evolución ha crecido desde ese año: entonces, un 39 por ciento de los afines a ese partido rechazaba esa teoría científica, y actualmente, lo hace el 48 por ciento.
Entre los adherentes al Partido Demócrata el 67 por ciento cree en la evolución, tres puntos porcentuales más que en 2009, mientras que el 27 por ciento se resiste a esa teoría.
Incluso entre quienes aceptan esa tesis científica, un 24 por ciento cree que Dios tuvo un rol importante: ese porcentaje se mostró de acuerdo con la idea de que "un ser supremo guió la evolución de los seres vivos con el fin de crear humanos y otro tipo de vida en la forma en que existe hoy".
Las creencias también varían según los grupos religiosos, siendo los protestantes evangélicos blancos los que más rechazan la idea de la evolución (64 por ciento).
También rechazan la teoría un 50 por ciento de los protestantes negros, un 31 por ciento de los católicos hispanos y un 26 por ciento de los católicos blancos.
El estudio se produjo a partir de entrevistas telefónicas en inglés y español entre el 21 de marzo y el 8 de abril de 2013, sobre una base nacional de 1.983 adultos en todo el país, y con un margen de error de tres puntos porcentuales.