Fiscalía solicitó admitir a trámite querella por fichaje de Neymar en FC Barcelona
José Perals consideró que hubo "contratos simulados" entre el jugador y el club "culé".
Apuntó al timonel del elenco "culé" por apropiación indebida.
El timonel de Barcelona junto al astro brasileño
La Fiscalía de la Audiencia Nacional en España solicitó al juez Pablo Ruz que admita a trámite la querella por apropiación indebida interpuesta contra el presidente de FC Barcelona, Sandro Rosell, por el fichaje del delantero brasileño Neymar, ante la posibilidad de que los contratos que lo sustentaron fueran "simulados".
El fiscal José Perals pidió al juez en su informe que admita a trámite la querella presentada por un socio del club, puesto que los contratos del jugador "que se han ido firmando entre las partes en ocasiones no responden a lo indicado en los mismos, tratándose en algún caso de contratos simulados", y en otros casos se cambian de tipo contractual de manera fraudulenta.
En esa misma línea, apoya la tesis del querellante de que no se sabe la cantidad que efectivamente pagó el cuadro "blaugrana" por el fichaje del delantero y se ha ocultado por ello a los socios una información que debía ser pública.
Si bien considera que ahora no es "urgente y necesario" citar a declarar a Rosell, reclama al juez que dicte una serie de diligencias, entre ellas pedir a la FIFA que aporte la documentación del fichaje.
También reclama al juez que pida al propio jugador el contrato que firmó con la sociedad N&N, propiedad de su padre, por el que le cedía sus derechos; libre una comisión rogatoria a Brasil para solicitar de Santos CF el contrato de traspaso del jugador, y cite como imputados a los empleados de Deloitte que hicieron la auditoría de las cuentas de Barcelona.
El fiscal desgrana los contratos que hicieron el club, Neymar y la empresa de su padre para su fichaje el pasado año y concluye que, tras analizarlos y compararlos con las cuentas de Barcelona, podrían ser constitutivos de un delito de apropiación indebida en calidad de distracción.
En rigor, el 15 de noviembre de 2011, Barcelona, Neymar y N&N (empresa que iba a adquirir sus derechos en 2014) firmaron en Sao Paulo (Brasil) un contrato por el que el club manifestaba su intención de contratar al jugador en 2014, cuando terminaran sus derechos con el Santos CF.
El club catalán pactó abonar en ese momento a N&N 10 millones en virtud de un "contrato de préstamo" que, según el fiscal, era simulado y se trataba en realidad de una garantía para el futuro fichaje.
Además, se acordó que el precio para adquirir a Neymar que tenía que pagar por "derechos federativos y económicos" era de 40 millones (en los que se incluían los 10 del "préstamo") y se estableció una cláusula de penalización en caso de incumplimiento del contrato por importe de 40 millones.
Finalmente, el 3 de junio de 2013, Neymar, N&N y los "culés" pactaron resolver ese contrato de adquisición porque el jugador se iba a incorporar antes de 2014 al club catalán, en virtud a un acuerdo de transferencia de derechos federativos del Santos CF que también se firmó por una cantidad que se desconoce.
En ese momento, Barcelona reconoció que no había cumplido el contrato de 2011 (ya que el jugador se debía incorporar al club catalán en 2014 y aún no había acabado su relación con el Santos CF) y que tenía que abonar la cláusula de penalización de 40 millones a N&N y, en el mismo acto, se firmó el contrato de trabajo del jugador.
Por ello, el fiscal considera que lo que en principio era un contrato de fichaje (el firmado en 2011) se cambió por una cláusula de penalización del mismo y que así "los 40 millones se abonan finalmente como una cláusula de penalización cuando en realidad inicialmente eran por la adquisición de los derechos económicos y federativos del jugador".
Los gastos del fichaje de Neymar solo aparecen en el Informe de Gestión del Barcelona de 2013, pero en una cantidad "sin cuantificar", a pesar de que ese año se tenía que haber apuntado en la contabilidad.