Día de los Enamorados: Aumenta el robo de chocolates

Este 14 de febrero, en que se celebra el Día de los Enamorados, el comercio ve incrementada sus ventas hasta en un 30 por ciento, pero también tiene como consecuencia aumenta de robos hormiga en los supermercados.

Según cifras de la empresa Alto, especializada en la reducción de pérdidas patrimoniales derivadas de delitos, el robo de chocolates en la semana previa al Día de los Enamorados concentra el 30 por ciento de los hurtos del mes.

El peak de estos delitos se registra el mismo 14 de febrero.

Sobre las ventas, Rafael Cumsille, presidente de la Confederación de Comercio Detallista y de Turismo de Chile, indicó que "es una fecha bien interesante para el comercio detallista y turismo del país, esperamos que las ventas de algunos rubros aumenten. Por ejemplo, las flores, artículos de regalos, las chocolaterías especialmente y los restaurantes".

"La ventas del Día de San Valentín si las comparas con un día normal, hay que pensar en un 25 por ciento al 30 por ciento", indicó.

Además, según una encuesta realizada por el centro de estudios Plaza Pública Cadem, siete de cada 10 personas pretende regalar algo.

Las opciones preferidas son perfumes, flores y chocolates. Entre los resultados más llamativos del sondeo, está que el 55 por ciento de las personas celebrará este 14 de febrero, independientemente de si tiene pareja o no.

Alta cifra de matrimonios

Esta fecha también contempla ser una jornada importante para el Registro Civil, ya que el pasado 2013 unas 539 parejas reservaron una hora para contraer matrimonio durante ese día, el doble que el 2012.

Este 2014 unas 1.054 parejas reservaron hora para casarse este 14 de febrero, casi el doble de los agendados el año pasado.

La región donde se registran más uniones civiles durante la presente jornada es la Metropolitana, seguida por las regiones del Biobío y Valparaíso.

Durante esta fecha se exalta el enamoramiento, una emoción que -a pesar de que idealiza- es de origen netamente biológico y psicológico.

La psicóloga y directora del Laboratorio de Relaciones Interpersonales y Psicología Evolucionaria de la Universidad de Santiago, Ana María Fernández, explicó que "todo el cerebro está revolucionado".

"En los centros dopaminérgicos, como cuando uno tiene adicciones que nos producen placer, todo eso está activado cuando uno está enamorado. Entonces, al mismo tiempo, produce una sensación algo obsesiva, que uno siempre piensa en la persona, porque uno está con esos centros tremendamente sobreactivados", indicó.

Agregó que "al mismo tiempo las vías de serotonina están disminuidas, o sea, está apagado toda esa parte que es un cable a tierra".