¿Por qué los humanos no tienen una temporada de celo?
Semanalmente, la revista BBC Focus resuelve dudas de sus lectores. Acá, una selección de respuestas.
Los factores sociales pesan más que la disponibilidad de alimentos en la reproducción humana
El ciclo menstrual genera cambios sutiles en el comportamiento sexual de las parejas.
¿Por qué los humanos no tienen una temporada de apareamiento?
La mayoría de los animales sincronizan su ciclo reproductivo, de modo que las crías nazcan cuando haya más alimento disponible y el clima no sea tan duro. Pero hay excepciones.
Muchas razas de perro entran en celo dos veces al año y muchos roedores se reproducen en forma continua todo el año.
Para algunos primates, los factores sociales son más importantes que la disponibilidad de alimentos. Las chimpacés no avisan cuándo están fértiles y son promiscuas. Se cree que esto reduce la tasa de infanticidio por parte de los machos, que no pueden estar seguros de la paternidad de ninguna de las criaturas.
Puede que esto sea importante también para los seres humanos. Sin embargo, el comportamiento sexual de las personas varía sutilmente a lo largo del ciclo menstrual.
Un estudio de 2007 de la Universidad de Nuevo México concluyó que las bailarinas eróticas ganaban más dinero cuando eran fértiles, quizás porque se comportaban de manera más sexy en forma inconsciente.
¿Cómo nos convertimos en seres de sangre caliente?
Ser de sangre caliente significa que el cuerpo se mantiene a una temperatura fija, sin importar cuán frío es el ambiente que lo rodea. Es lo que se conoce como homeotermia.
Menos del 1% de los animales son homeotérmicos. Básicamente, la condición se limita a los mamíferos y aves.
La desventaja de mantener la calefacción encendida todo el tiempo es que se consume más combustible. Los animales homeotérmicos necesitan cerca de diez veces más alimentos. Sin embargo, las reacciones químicas generalmente ocurren más rápido a temperaturas más altas y un cuerpo cálido puede trabajar al mismo nivel en ambiente fríos, como de noche, bajo tierra o en el invierno.
Los insectos por lo general no pueden volar cuando hace mucho frío porque sus músculos no se contraen lo suficientemente rápido, y muchos reptiles tienen que tomar el sol por varias horas todas las mañanas para calentarse.
Una temperatura corporal regulada también permite la evolución de enzimas que se sincronizan para trabajar en forma eficiente dentro de un rango preciso de temperatura.
El lado negativo de esto es que la hipotermia o la insolación pueden ser suficientes para inhabilitar nuestras enzimas y matarnos.
Otra posibilidad es que la homeotermia haya ocurrido como una estrategia para combatir infecciones. Un estudio del año 2010 del Albert Einstein College of Medicine en Nueva York encontró que la temperatura corporal de 36,7C era suficiente para protegernos de la mayoría de las infecciones micóticas.
Los mamíferos y las aves rara vez sufren de enfermedades micóticas, que son un verdadero problema para los peces, como cualquier persona que haya tenido un pez dorado sabe bien