Exposición fotográfica rescata 30 años de memoria chilena

Son más de dos mil capturas las que se pueden revisar a través de la exposición "Ritos y memoria", que por estos días está montada en el Centro Cultural Gabriela Mistral. Se trata de una antología visual de lo que ha sido la trayectoria de 30 años que alcanza el fotógrafo Claudio Pérez.

Esto parte en "el año 83, cuando vuelvo al país, con una credencial y una acreditación falsa, creada por unos amigos en Brasil, en la que el logotipo lo construimos con una papa. La cortamos por la mitad, creamos el logo, le pusimos 'Imagen nativa', pescamos un betún Nugget líquido, y se creó todo. Con eso llegué a la torre de atrás del (edificio) Diego Portales, donde estaban las Fuerzas Armadas, al piso 11 donde estaba la Dinacos, la Dirección Nacional de Comunicación Social y me acredité como corresponsal extranjero", contó Pérez a Cooperativa.

Un puntapié inicial icónico para su carrera, cuando "no tenía idea lo que era hacer una foto" y que revive a través de la revisión de un material mayoritariamente análogo, ya que apenas el cinco por ciento del material que el profesional tiene expuesto en la actualidad es digital.

Pero el proceso tiene una doble perspectiva. Por un lado, está el aspecto práctico desempolvar, revisar y recuperar detenidamente sus archivos. Pero por otro, dijo Pérez, está el hecho de que "vuelves a sentir los olores, sabores, el dolor, el grito, pero también el amor. Vuelves a sentir todos esos momentos de placer y de rabia, al ver estas imágenes".

Fueron muchas horas recorriendo los negativos. Sesiones infinitas, frente a ventanas o a mesas de luz, revisando formas y composiciones atractivas, incluso sin saber con que se iba a encontrar. Porque, claro, revivió episodios, pero también se encontró con cosas que ni él mismo sabía que tenía.

Y ahora están expuestas en el Centro Cultural Gabriela Mistral en una selección de formato 90 por 60 centímetros, y también hay una pieza más grande que es "un mural de la memoria".

Cámara en el ojo

Claudio Pérez es reconocido como el "fotógrafo de la dictadura". En la exposición están esos registros que mezclan protestas, violencia y manifestaciones emblemáticas de la brutal década de los ochentas que se vivió en Chile.

Sin embargo, a través de su lente también quedaron plasmados instancias más familiares, íntimas, y además su trabajo con los indígenas en el norte.

"¿Por qué uno hace fotografía? Porque uno ama, porque guarda los recuerdos de tus seres queridos, de los que se han ido. Tus padres. Tú guardas las fotos. Algún día vamos a pasar a engrosar esas fotos en las billeteras de los hijos. Pero también fotografías por rabia, por denunciar, por alertar a la gente", indicó Pérez.

Así, esta exposición también lo ha hecho desprenderse por un rato del profesional y apreciar lo que ha hecho con una visión distante. "Me di cuenta que tenía una máquina metida en el ojo. Nunca me había sacado la cámara del ojo. Ahora cuando veo y revisito esto pienso 'parece que esa cámara me la incrusté mentalmente y están ahí las imágenes'. Parecía que estaba todo el día, todos los días fotografiando, es increíble".

Aún así advierte que hay que darse cuenta de lo "fantástica que es la imagen", es su consejo para quienes visiten la exposición.

"Hoy día todos usamos cámaras, hacen fotografías, a cada instante uno hace una foto. Pero hay que tener cuidado, porque también se empieza a banalizar eso. En el disparar por disparar se te extravía la memoria. Se desintegra la cosa que es mucho más concreta y específica" en el valor que se le atribuye a este registro visual.

La exposición "Ritos y memoria" del fotógrafo Claudio Pérez estará instalada hasta el próximo 6 de julio en la Sala de Artes Visuales (edificio B piso -1) del Centro Cultural Gabriela Mistral. La entrada es liberada.