Mauricio Hernández: Cualquier miembro de la DINA merecía ser ajusticiado
Desde la cárcel en Brasil, el ex frentista detalló aspectos de la campaña "No a la impunidad".
Asegura que no tuvo vinculación con el asesinato del senador UDI Jaime Guzmán.
Hernández Norambuena se refirió a varios aspectos de la política "No a la impunidad" llevada adelante por el FPMR.
Mauricio Hernández Norambuena, ex integrante del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR) y actualmente recluido en Brasil por el secuestro de un empresario, aseguró que la política "No a la impunidad" que llevó adelante el grupo armado se justificaba y tenía como objetivo ex represores y civiles, como el senador de la UDI Jaime Guzmán, asesinado en 1991 por frentistas.
Hernández, condenado a 30 años de prisión por el plagio, aseveró que en 1989 se inicia la campaña "No a la impunidad" y el año siguiente se profundizó "como una política más coyuntural, porque era una de las cuestiones que veíamos más sentida de la población. Como se iba a hacer vista gruesa a los miles de desaparecidos, los muertos, las torturas".
Dentro de este plan, describe 3 "ajusticiamientos" previos: El baleo del comandante (r) de escuadrilla FACh Roberto Fuentes Morrison, el del otrora coronel de Carabineros Luis Fontaine Manríquez, ambos por su vinculación a violaciones a los derechos humanos y que habían sido declarados inocentes por la justicia. Luego, se asesina a Víctor Enrique Valenzuela Montecinos, escolta de Augusto Pinochet. Todos estos hechos entre junio de 1989 y octubre de 1990.
"Los cuatro comandantes de la junta estaban condenados de nuestra parte, no hay ni que preguntar", dijo Hernández Norambuena en una entrevista concedida en mayo al medio Ahora TV, dada a conocer este martes.
"Fontaine (Manríquez) está adentro el año 90 que se sanciona la política de 'No a la impunidad'. Ahí se barajan varios nombres, el de Fontaine aparecía claro por los degollados, había otros como (Carlos) Arredondo, (Sergio) Arellano Stark, (Miguel) Krassnoff, esos eran nombres fijos. Había unos 10 a 15 militares y había varios civiles aparte de Guzmán, como (Sergio) Fernández (ministro de Pinochet y senador designado), Ambrosio Rodríguez (ex Procurador General de la República en dictadura)", añadió el "comandante Ramiro".
El ex frentista explicó que en esta campaña eran objetivos "personajes que tuvieran vinculación con la violación a los derechos humanos" y que en el caso de los civiles, que si bien no actuaron directamente, "algunos tienen compromisos de otra manera" a las violaciones a los derechos humanos.
Respecto a eso, afirmó que "incluso ya se ha sabido que hubo un sector, donde participaba (Jaime) Guzmán, que en el año 75 pidieron al Ejército mano más dura con los comunistas y celebraron cuando hicieron desaparecer dos direcciones del PC, después la de la JJ.CC. y dentro de eso está el caso (de Luis) Fontaine, el caso Guzmán".
"Más allá de las figuras que iban a tener más impacto, que eran los mandos y llegar a ellos, más allá de eso, partíamos de la base que cualquier miembro de la DINA merecía ser ajusticiado", enfatizó Hernández Norambuena.
El crimen de Guzmán
En cuanto al crimen de Jaime Guzmán, por el cual fue condenado hace pocos días el ex vocero internacional del FPMR Enrique Villanueva Molina, quien recibió una pena de 5 años de libertad vigilada como autor intelectual del atentado de carácter terrorista –pese a declararse inocente-, Mauricio Hernández desestima su participación, asegurando que la operación fue decidida por Mauricio Arenas, lo que según él, "es sabido por todos en el frente".
"Nosotros pretendíamos con el 'No a la impunidad' que sectores populares dispuestos a luchar comenzaran a exigir castigo a los culpables, porque ya se estaba en el camino de la justicia en la medida de lo posible. Y nosotros ir estimulando y mostrando que se puede hacer justicia por la propia mano", afirmó.
Sobre su paso por el FPMR, Hernández Norambuena lo considera como parte fundamental en su vida.
"Ser rodriguista ha significado mi vida, yo he sido eso, fui eso, soy eso y seré eso. Mi ideal y utopía continúa, sé que hay otros tiempos, pero el horizonte utópico permanece, no me voy a dar vuelta la casaca. Me considero un sobreviviente en eso y no puedo olvidar todas las hermanas y hermanos que murieron y los que lucharon y están vivos que fueron personas íntegras, se la jugaron. No voy a traicionar todo eso, toda la memoria del Frente y creo que me hizo ser un poco mejor de lo que era haber participado del Frente", concluyó.