OMS reafirmó que brote de ébola está subestimado en Liberia y Sierra Leona
El organismo cree que "una cantidad de casos invisibles" que no han sido detectados por el sistema sanitario.
"Nunca antes se había visto este fenómeno en un brote de ébola", añadió la organización.
Liberia y Sierra Leona concentran los casos de personas infectadas y fallecidas por el ébola.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) reafirmó que la magnitud del brote de ébola en Sierra Leona y Liberia ha sido subestimada y que hay "una cantidad de casos invisibles" que no han sido detectados por el sistema sanitario.
En una evaluación de la situación en ambos países, la OMS explicó que otro fenómeno que le permite afirmar que hay más casos que los reportados es que, apenas se abre un centro de tratamiento, éste es inmediatamente atiborrado de gente.
Entre esos nuevos pacientes figuran muchos que ni siquiera han sido identificados previamente.
Uno de los ejemplos más recientes lo constituye la apertura de un centro de tratamiento, provisto con veinte camas, en Monrovia, adonde inmediatamente llegaron setenta pacientes.
Liberia y Sierra Leona concentran los casos de personas infectadas y fallecidas por el ébola.
"Nunca antes se había visto este fenómeno en un brote de ébola", señaló la organización en un documento distribuido en Ginebra.
Los expertos de la OMS que se encuentran en Liberia también han confirmado que en zonas rurales los cadáveres son enterrados sin notificar a los funcionarios de sanidad, con lo que las causas del deceso no se investigan.
"Estos son brotes que se mueven rápido, creando desafíos para muchas de las entidades internacionales que aportan ayuda. La cantidad de personal, suministros, equipos, incluyendo los equipos de protección personal, no son suficientes para cubrir las necesidades", indicó la institución sanitaria mundial.
Los epidemiólogos de la OMS, tanto en Liberia como en Sierra Leona, están trabajando con otras agencias, incluidos Médicos Sin Fronteras y el Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, para preparar estimaciones más realistas del brote de ébola y comunicar la magnitud de las necesidades.