Se aleja posibilidad de cierre anticipado del comercio los domingos
El Gobierno montó una mesa de diálogo junto a los trabajadores y empresas del rubro.
La propuesta alternativa de un tercer domingo libre al mes tampoco convence a la industria.
Quienes se emplean en centros comerciales y supermercados reclaman la necesidad de pasar más tiempo con sus familias.
La reunión sostenida ayer por el Gobierno, los trabajadores del comercio y los empresarios del rubro evidenció la dificultad de consensuar puntos de acuerdo respecto de propuestas en torno a mejoras laborales.
La cita estuvo marcada por la propuesta de los diputados de la Comisión de Trabajo Tucapel Jiménez (PPD) y Nicolás Monckeberg (RN), que plantearon el pago de una compensación mayor por el trabajo dominical -por el costo familiar que implica- y el cierre del comercio a las 17:00 horas aquellas jornadas.
Tras el frontal rechazo de la industria los trabajadores presentaron una contrapropuesta para tener un tercer domingo libre al mes -actualmente tienen dos-, pero la idea tampoco gustó a los empresarios.
Los sindicatos del comercio calificaron como un avance la propuesta de los diputados Jiménez y Monckeberg, pero aseguraron no compartirla. Otra idea que surgió en la mesa fue la de sumar un sábado libre al mes.
Claudio Sagardía, Ppresidente de la Confederación de Trabajadores del Comercio – que reúne a los funcionarios de Ripley, París, Santa Isabel y Falabella- dijo que un domingo más libre al mes no impactaría en las remuneraciones.
"Cada vez es menos la gente la que gana comisiones. Las empresas se han ido adaptando paulatinamente al tema de las comisiones. Ya casi todas están pagando el ingreso mínimo y un poquito más. Nosotros tenemos que avanzar, ojalá, a no perder dinero, pero sí a un descanso y a la familia", señaló.
Hernán Méndez, presidente de la Confederación de Servicios e Industrias del Comercio, señaló que lo primordial es garantizar el descanso, y eso no lo logra el cierre anticipado: "Se cierra a las cinco el comercio, pero ¿a qué hora se sale? Los malls se cierran a las cinco y están llenos, y llenos los supermercados... ¿A qué hora se sale? A las siete. ¿A qué hora llega (a la casa)? ¿A las ocho? ¿Mejoró (con eso) la calidad de vida?", planteó.
Tema complejo
Los empresarios señalaron que iban a analizar las opciones, pero remarcan que éste es "un tema complejo".
"Cuando hemos analizado estas alternativas existen desafíos logísticos grandes, porque significa que todos los trabajadores que trabajan más de 20 horas (semanales) tendrían tres domingos libres, y eso significa operar con un 25 por ciento de la dotación los días domingo", expuso Susana Carey, presidenta de la Asociación de Supermercados.
"Eso es muy complejo y puede afectar la calidad de servicio o tender a más venta asistida, porque hay cargos que requieren mucha especialización: carniceros, pasteleros; cargos donde no es tan fácil con jornadas de 20 horas", indicó.
El presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Ricardo Mewes, señaló que "claramente nuestra postura es el no cierre el día domingo y a partir de ahí veremos cuales compensaciones son adecuadas, pero eso lo vamos a conversar en conjunto en esta mesa y tenemos que ponernos de acuerdo para ello".
El próximo viernes se reúne nuevamente esta mesa de trabajo, que debe llegar a una determinación durante octubre.
Pro familia
Ante este panorama Jiménez, quien preside la Comisión de Trabajo de la Cámara Baja señaló que lo importante es que la ley que salga del Congreso sea "pro trabajador".
"Para ellos, hoy día, trabajar un día domingo o un día festivo es exactamente igual que trabajar un día lunes o un día martes, y eso –lo hemos dicho con todas sus letras- no puede ser, porque el costo familiar de trabajar un día domingo es muy grande, y eso se tiene que compensar de alguna manera, y lamentablemente no hay otra manera que con un recargo a su remuneración", argumentó.
"Si esto se combina con un cierre anticipado para que algo del día tengan la posibilidad de ver a su familia sería lo ideal, porque las ventas no van a bajar", señaló.
Marcela Ramírez, quien trabaja en el Centro Comercial Apumanque y podría ser una de las beneficiadas por el proyecto de ley, se declaró expectante ante la iniciativa, que le permitiría -dice- pasar más tiempo con su familia.
"Las personas merecemos un tiempo más familiar. Por lo mismo se ve que la sociedad, las familias, están totalmente destruidas, porque no tenemos tiempo para compartir en familia", dijo.
La medida tal vez "afecta a los grandes empresarios, pero a nosotros, como trabajadores, ¿en qué nos va a afectar? En que vamos a estar más tiempo con la familia y los hijos, que apenas los vemos, si llegamos a puro dormir a las casas", sostuvo.