El masivo último adiós de Pedro Lemebel
Entre aplausos, banderas, plumas y flores se homenajeó y despidió al escritor.
Unas 500 personas acompañaron el recorrido que tuvo un homenaje de las pergoleras y también pasó por el Museo de Bellas Artes y La Moneda.
El cortejo fúnebre partió en la iglesia de la Recoleta Franciscana
Entre aplausos, banderas, plumas y flores se homenajeó y despidió al escritor Pedro Lemebel, quien falleció el pasado viernes víctima del cáncer.
El cortejo fúnebre partió en la iglesia de la Recoleta Franciscana y unas 500 personas acompañaron el recorrido que tuvo un homenaje de las pergoleras y también pasó por el Museo de Bellas Artes y La Moneda.
El hermano de Lemebel, Jorge Mardones, se mostró sorprendido y emocionado por el cariño al fallecido escritor.
"Para mí es algo muy fabuloso porque nunca esperé que mi hermano fuera tan famoso y querido por la gente. Yo creo que él está feliz en estos momentos de estar junto a su madre y nosotros también lo estamos porque pensamos que Chile lo amaba", señaló emocionado.
Su familia, en voz de Carmen Soria y Héctor Núñez, agradeció a todos los asistentes y a quienes acompañaron en vida al escritor.
"Ojalá que la rebeldía de Pedro se fortalezca y crezca en la sangre y a seguir luchando contra este sistema de mierda que tenemos", manifestó Soria en el funeral.
En el mismo lugar, Núñez dijo: "Escuché que el cáncer le había ganado a Pedro y eso es mentira. Él cabalgó arriba de la enfermedad y además, la manera que nos dejó en el hospital fue una performance de principio a fin".
La actriz Vanessa Miller, amiga del escritor, espera que la lucidez del literato no se termine con su muerte.
"Ojalá nos levantáramos todos los días y tuviéramos un Lemebel que nos pusiera la lupa que él sabía poner, que hacía que esa cosa estructurada, conservadora, cínica y mentirosa de los poderes fácticos del país quedaran en evidencia y apareciera la verdadera moral del chileno, que es inclusiva, tolerante, folclórica y con humor", mencionó la actriz.
Junto con la lectura de algunos de sus escritos, cantos y despedidas, se homenajeó la figura de Pedro Lemebel, cuyo restos ya descansan en el Cementerio Metropolitano.