La frustración de los laicos de Osorno que viajaron a Bolivia para hablar con el papa
Querían informarle sobre la "situación insostenible" de la diócesis comandada por el obispo Juan Barros.
"Nos tomaron detenidos por 14 horas", relató a Cooperativa Juan Carlos Claret.
Barros es sindicado por los denunciantes de Fernando Karadima como encubridor de los abusos sexuales.
Juan Carlos Claret, representante del movimiento laico de Osorno, relató este miércoles en Cooperativa el difícil viaje que realizó junto a otras personas a Bolivia en el marco de la visita del papa Francisco a ese país, con la intención de informarle personalmente al pontífice sobre la "insostenible situación" de la diócesis comandada por el obispo Juan Barros, quien es sindicado como encubridor de los abusos sexuales del cura Karadima.
"Se nos había brindado una oportunidad para llegar al papa, que era justo a la llegada de Francisco a la casa del cardenal Julio Terrazas. Estábamos ahí dispuestos, con ayuda inclusive, y ocurrió que la policía e Interpol, sin determinados cargos, nos toman detenidos por 14 horas", relató Claret a Una Nueva Mañana.
"Después de esa detención, estuvimos luchando y seguimos a Francisco a todas las instancias, pero 'pasó la micro', entonces después no se logró tener una oportunidad como la que se nos había brindado aquella noche", lamentó el activista.
Pese a todo, sí se lograron "con cabalidad otros dos objetivos" que eran llegar a las personas relacionadas con el papa, que viajan con él o que lo recibieran en Bolivia, además de contacto con la prensa, explicó
"Espero que ellos le hayan entregado la información, y si no fuera por eso, espero que por la prensa se haya informado, porque 35 medios internacionales cubrieron la situación", indicó.