La dramática historia detrás del retiro del tenis de Mardy Fish
El tenista estadounidense confesó los pesares que vivió previo a su retiro.
El tenista estadounidense Mardy Fish (541°) vio el final de su trayectoria como profesional al caer ante el español Feliciano López (19°) en la segunda ronda del US Open, torneo en el que en 2012 experimentó un ataque de pánico y que reflejó la decaída de uno de los mejores referentes de su país.
En un conmovedor artículo en el sitio web The Player's Tribune, Fish relata la razón que motivó su renuncia al "mayor partido" de su vida: "Cuarta ronda del Abierto de los Estados Unidos, en el día del cumpleaños de mi padre, en el estadio "Arthur Ashe", televisado por CBS, contra Roger Federer".
"Estoy a horas de jugar contra el mejor de todos los tiempos, con la posibilidad de conseguir el mejor resultado de mi vida, en mi torneo favorito. Estoy a horas de jugar el partido por el que todos trabajamos, por el que nos sacrificamos, y no puedo hacerlo. Literalmente, no puedo hacerlo", recuerda el ya ex tenista de 33 años.
Cuando el ránking de la ATP le situaba entre los ocho mejores jugadores del circuito masculino, Fish encontró una barrera infranqueable: un desorden de ansiedad. En un episodio ocurrido en 2009 encontró el origen de su trastorno.
"Tenía 27 años y hasta allí había tenido una bonita carrera. Podía estar orgulloso de ella: había ganado la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de 2004 (superado por Nicolás Massú en la final), había obtenido buenos resultados en algunos Grand Slams, había visto el mundo, hecho una buena vida. Pero nada era sostenido", recalcó.
"Eso que había servido tanto cuando tenía veinte tipos delante, se volvió algo estresante y después destructivo, creo, cuando el número se redujo a siete. La idea de que no era lo suficientemente bueno fue muy poderosa. Lo peor es que se transformó en un interruptor muy difícil de apagar..." añadió Fish que en 2012 se sometió a una intervenció quirúrguica para tratar las aritmias que no lo dejaban dormir.
Desde ese incidente que precipitó su incomparecencia en el choque que debía medirle a Federer, el jugador de Minnesota apenas disputó quince partidos: nueve en 2013 y seis en 2015.
Reapareció el pasado marzo en Indian Wells y compitió en los meses de julio y agosto en Atlanta y Cincinatti antes de despedirse de la competición en Nueva York.
"Esta es una historia sobre cómo, con una correcta educación, conversación y tratamiento, las cosas que una enfermedad mental te quita, se pueden recuperar", sentenció.