Sismólogo: Uno debiera esperar réplicas por un buen tiempo
El director del Centro Sismológico Nacional, Sergio Barrientos, conversó con Lo Que Queda del Día en Cooperativa.
"La frecuencia de los sismos debiera hacerse más espaciada", apuntó el especialista.
La Región de Coquimbo concentró los mayores daños tras el terremoto.
Más de 500 sismos se han registrado ya tras el terremoto 8,4 Richter del pasado 16 de septiembre. En este contexto, el director del Centro Sismológico Nacional, Sergio Barrientos, conversó con Lo Que Queda del Día en Cooperativa con respecto a qué esperar sobre las réplicas futuras.
En primera instancia, el especialista destacó que "estamos conociendo cada vez de mejor manera cómo ocurren los terremotos frente a las costas de Chile. Son las primeras imágenes que tenemos del terremoto del 2010, las de este terremoto y las del terremoto en 2014 en Iquique donde podemos mapear la función de desplazamiento, es decir cómo penetra la placa de Nazca bajo la placa Sudamericana".
"Nos estamos encontrando con que hay cosas que no son similares. En este caso la columna de desplazamiento tiene lugares con desplazamientos muy importantes y otros donde hubo menos. Y es probable que en esos lugares donde hubo menos desplazamiento en el terremoto principal ahora estén liberando toda esta energía en forma de réplicas un poquito mayores, de magnitud seis o superiores", agregó.
Al ser consultado sobre las magnitudes de los últimos sismos, Barrientos apuntó que "esperaría que estas réplicas se vayan disolviendo en el tiempo, se vayan expandiendo. El primer día están comprendidas sólo en la zona de ruptura, el segundo día ya se van extendiendo un poco hacia el norte y un poco hacia el sur y probablemente dentro de los próximos días o semanas algunas alcancen a llegar a Valparaíso y sean más bien réplicas de tipo instrumental".
En relación al periodo por el cual se podrían prolongar los sismos, el sismólogo comentó que "en general, para magnitudes de 8,4, uno debiera esperar réplicas por un buen tiempo. Nosotros creemos que durante las primeras semanas se van a dejar sentir sismos sensibles en la región, algunos de ellos sensibles acá en Santiago", cuya frecuencia "debieran tender a disminuir en el tiempo, a hacerse cada vez más espaciadas, y las magnitudes, en general debieran comenzar a decrecer".
De todas maneras el investigador remarcó que tras el terremoto de febrero de 2010 "las réplicas se prolongaron por varios años, incluso uno podría considerar réplicas tardías de hasta tres o cuatro años después de ocurrido el evento".