Blur deleitó a casi 10 mil fanáticos en su regreso a Chile

Existían muchas diferencias entre su debut en 2013 y este retorno a Chile: un recinto más reducido (de Pista Atlética a Movistar Arena), un show renovado y un nuevo disco bajo el brazo titulado "The Magic Whip".

Esos fueron los ingredientes que marcaron el concierto que Blur ofreció la noche de este miércoles en el recinto del Parque O'Higgins ante casi 10 mil personas.

La apertura del show estuvo a cargo de los nacionales Los Tres, que a punta de clásicos y de la calidad de sus nuevos músicos lograron animar al escaso público que había en ese momento. "Quiero pedir encarecidamente que apaguen las pantallas. No le hacemos publicidad gratis al gobierno... a nadie, en realidad", dijo Álvaro Henríquez en el inicio de los 40 minutos de música que ofrecieron.

Casi media hora después saltó al escenario el conjunto británico Blur con Damon Albarn a la cabeza y con el bajista Alex James fumando un cigarrillo. "Go Out" de la última producción y "There's no other way" dieron la partida al espectáculo de los europeos.

Algunos problemas de sonido en el inicio del show no complicaron a Albarn que se mostró feliz sobre el escenario, comunicándose con el público y lanzando agua en reiteradas ocasiones.

"Coffe & TV", "For Tomorrow" y "Tender" mostraron pinceladas de lo que la numerosa banda de apoyo era capaz de aportarle al sonido de Blur, que a esa altura ya se sentían como en el living de su casa.

Fue tanta la intimidad con el público que Damon Albarn invitó a 10 fanáticos a subir al escenario para compartir la interpretación de "Parklife". "En un mundo ideal podrían subir todos ustedes, no habría audiencia. Eso sería muy interesante", dijo el cantante tras desatar la performance.

Para el resto de las casi dos horas de show quedaban canciones como la celebrada "Song 2", "Girls & Boys" y "The Universe".

Así culminaba el paso del "The Magic Whip Tour" por Chile, dejando una sensasión más reconfortante que eufórica.