Fiscalía llama a declarar a diputada opositora que negó el saludo a Evo Morales
Norma Piérola fue denunciada por racismo y discriminación.
La parlamentaria señaló que fue en rechazo a la tercera reelección del Mandatario, lo que cataloga como "inconstitucional".
La legisladora, que pertenece al Partido Demócrata Cristiano (PDC), deberá prestar declaración el próximo 19 de octubre.
La Fiscalía boliviana citó a declarar a la diputada opositora Norma Piérola, quien ha sido denunciada por racismo y discriminación porque le negó el saludo al presidente de Bolivia, Evo Morales, durante un acto oficial.
El fiscal Roger Velásquez informó de que la legisladora, que pertenece al Partido Demócrata Cristiano (PDC), deberá prestar declaración el próximo 19 de octubre, según indicó este viernes la agencia estatal ABI.
En mayo pasado, un juzgado de La Paz rechazó la denuncia, que había sido presentada por el viceministro de Descolonización, Félix Cárdenas, quien también preside el Comité Nacional de Lucha Contra el Racismo y toda forma de Discriminación.
Sin embargo, la Fiscalía revocó la decisión del juzgado, por lo que "la investigación retomó su curso" y una vez que la diputada preste declaración, se convocará a los testigos, explicó el fiscal.
Velásquez precisó que no se llamará a declarar al presidente Morales.
El pasado 1 de diciembre Piérola asistió a un acto oficial para recibir su credencial como diputada y en ese evento, Morales alzó la mano para saludarla y ella lo eludió, lo que provocó la denuncia por supuesta discriminación y racismo contra el gobernante, por su origen indígena.
Piérola rechazó saludar a Morales como protesta porque ella y la oposición consideran inconstitucional que Morales haya sido elegido por tercera vez, ya que la Constitución de 2009 limita a dos el número de mandatos consecutivos de un presidente.
Morales ganó los comicios de octubre pasado avalado por un dictamen del Tribunal Constitucional que considera legítimo un tercer mandato bajo el argumento de que Bolivia fue refundada como Estado Plurinacional con la Constitución de 2009 y, por tanto, el primer mandato de Morales no cuenta para ese cómputo.
La Ley contra el racismo que rige en Bolivia ha sido cuestionada por organizaciones internacionales de defensa de los derechos humanos como Human Rights Watch al considerar que, por la imprecisión con la que tipifica los delitos, puede ser utilizada para atacar a la libertad de expresión y también para coartar a los medios de comunicación.