Javier Cámara y “Truman”: “Se aprende mucho más de la vida a través de la dureza de la muerte”

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Autor: Cooperativa.cl

El premiado actor español es coprotagonista junto a Ricardo Darín de la película “Truman”, de Cesc Gay, que ya está en cartelera en Chile.

Es la historia de dos amigos que comparten el dolor por el cáncer terminal que afecta a uno de ellos.

La amistad verdadera entre dos hombres frente a la enfermedad y la muerte es la temática principal de la premiada cinta española "Truman".

Una de las más elogiadas películas estrenadas el 2015 en España es "Truman", dirigida por Cesc Gay y que protagonizan dos actores muy populares y queridos entre los seguidores del cine iberoamericano: el argentino Ricardo Darin ("El hijo de la Novia", "Relatos Salvajes", "El Secreto de sus Ojos", "Luna de Avellaneda") y Javier Cámara, actor español que muchos recordarán por sus roles en cintas de Pedro Almodóvar como "Hable con Ella", "La Mala Educación" y "Los Amantes Pasajeros", además de otras junto a conocidos directores hispanos.

"Truman" es una cinta realista, que trata un tema complejo: dos grandes amigos en la madurez de sus vidas y el cáncer terminal que sufre uno de ellos, "Julián" (Darín), quien decide abandonar el doloroso tratamiento para su enfermedad y aceptar su suerte. Es entonces cuando aparece en su departamento "Tomás", el personaje de Javier Cámara, para pasar cuatro días juntos antes del inminente final.

Es una cinta muy emotiva, que no trata sobre la eutanasia, ni ningún tipo de dilema científico-moral, sino que profundiza en la verdadera amistad y su relevancia en la vida de las personas. Al menos así lo cree Javier Cámara, quien desde Madrid comentó a Cooperativa los alcances del filme.

"Yo creo que es un canto a la amistad. Siempre me planteaba intentando interpretar esta película, cuántos amigos tengo de verdad para levantar el teléfono a las 4.00 am y pedir ayuda de este tipo. Uno no los puede contar con muchos dedos de la mano. No puedes llamar a la familia, porque la familia se asusta. No puedes llamar a ciertos amigos más frágiles. Uno siempre tiene que tener a una buena persona cerca que le pueda ayudar en los momentos difíciles. Yo creo que esta película habla de eso. Enfrenta la muerte, enfrenta la enfermedad y el conflicto que la hace un canto a la amistad, y por eso es una película emotiva, empática y terapéutica".

Los muertos sobre la mesa

Cámara recalca que la película escrita por Cesc Gay, está hecha desde lo íntimo, con una historia basada en la experiencia personal del director y fraguada en un proceso de trabajo conjunto entre él, Ricardo Darín y el mismo Javier. "Yo ya había hecho varias películas con Cesc y sabía que se enfrentaba a este tema desde hacía tiempo, había vivido una pérdida personal y sabía que tenía esta historia en el cajón, esperando a madurar y esperando a que pasara el tiempo para que la historia no estuviera demasiado cargada de emoción y de tragedia".

Y agrega con entusiasmo: "me emocioné mucho cuando leí el guión y también cuando supe que Ricardo dijo que si a la historia. Durante 20 días estuvimos en mi casa aquí en Madrid y trabajábamos en el salón de mi casa, yo preparaba café y compraba pasteles y pastas para hacerlo todo lo suficientemente suave y para que todos nos sintiéramos bien. El primer día, Ricardo entró con el guión entre las manos y antes de lanzarse al café, dijo 'pongamos los muertos sobre la mesa'. El empezó a contar su experiencia personal sobre por qué quería hacer esta película, por qué tenía la necesidad de hacerla y Cesc y yo teníamos la misma motivación. A todos se nos han ido personas importantes. Siempre lo quieres hacer de otra forma, siempre quieres tener una especie de catarsis, un libro de estilo donde puedas apuntar las cosas para cuando pueda pasar otra vez, para madurar y hacerlo mejor. Yo creo que esta película nos ha hecho mejores a todos".

Libertad de elegir

Pero además de la amistad y el dolor por ver desaparecer a quien se ama, Javier Cámara recalca que la cinta también tiene un discurso importante respecto a la defensa de la libertad personal, al derecho a elegir como queremos vivir nuestras vidas, en el ámbito que sea. Consultado sobre si apoyaría a un amigo que tomara la decisión de dejarse morir producto de una enfermedad incurable, Cámara tiene una respuesta clara.

"Yo creo que lo apoyaría, la libertad personal está por encima de las libertades religiosas, económicas, corporativas, financieras, estatales. La libertad personal es lo único que nos queda, es lo más importante. Un país es inteligente cuando le da las armas a un ciudadano para poder hacer todo eso y mucho más. Para poder abortar, para poder tomar sus decisiones, para poder votar, para poder optar por distintas decisiones, para poder cambiarse de sexo, para poder ser homosexual, para poder acabar con su vida, para poder casarse en cualquier circunstancia, para poder viajar, para poder decir lo que quiera sin que nadie le castre. Un país es inteligente cuando trata a sus ciudadanos como seres inteligentes y les da las armas para que sean cada vez mejor", sostiene.

Y luego recalca que "apoyaría a un amigo que no puede más con esa situación, o por lo menos intentaría entenderlo. Escucharía, que es lo que la gente que lo está pasando muy mal es lo que necesita, alguien que esté, que escuche, acompañe, que mire de frente, que no mire de soslayo la enfermedad y que hable seriamente. Pero aunque parezcan temas que cogen demasiada importancia, al final es una película muy positiva, es un viaje emocional de dos amigos a lo largo de cuatro días donde uno aprende mucho más de la vida a través de la dureza de la muerte".

Pudor y sutileza

Pese a ser una película de mucho dramatismo en el guión, "Truman" no es una cinta que intente manipular al espectador o forzar la emoción fácil. Su poder reside en la mirada prudente, pudorosa y cuidadosa que da a la historia de fondo el director Cesc Gay, experto en temáticas masculinas, y en las actuaciones de Darín y Cámara, ambas muy contenidas, muy cotidianas, pero al mismo tiempo muy basadas en los silencios, miradas y gestos, más que en las palabras que los personajes se dicen entre ellos.

"Mi personaje es un invitado durante cuatro días, es un invitado que se va a ir a su casa, es una persona que pasa por ahí durante cuatro días y no va a volver a ver a Julián. Era una película muy peligrosa en ese sentido, donde uno tiene que involucrarse lo suficiente, donde uno tiene que decir todo con la mirada pero no tiene frases para decir. Era un personaje muy bello para construir y daba miedo, porque tenía muy pocas frases para decir. Pero Cesc me dijo que mi personaje era la mirada del espectador, que era la mirada incrédula del que se enfrenta por primera vez a todo", reflexiona Cámara.

Dolores Fonzi es también un aporte al filme como la amiga de "Julián", "Paula", quien es la que se ha llevado la parte más difícil al permanecer al lado del enfermo, cuidarlo a diario, preocuparse por él y presionarlo para que continúe adelante en su esfuerzo por mejorar. Al conocer la decisión del protagonista de abandonar el tratamiento es quien peor reacciona, con esa suerte de mirada egoísta, si es que se puede llamar así, a la autocompasión natural que surge en alguien que debe dejar ir a un ser querido.

"Tú lo que quieres es irte corriendo de ahí", acota Javier Cámara al describir la situación de los amigos que intentan ayudar a "Julián". "Quieres marcharte corriendo, quieres irte a tu casa y aferrarte a tu mujer y a tus hijos, no quieres enfrentarte a eso. Uno quiere salir corriendo del lugar donde está el conflicto, donde está la enfermedad. Se nos ha educado para no enfrentarnos a eso, nos han enfrentado de espaldas religiosamente a la muerte, nos han dicho que la muerte después es mucho mejor, que si eres bueno aquí, luego todo será mucho más bonito. Pero para quienes no creen, evidentemente es muy duro. Entonces está bien que el hombre tenga por si mismo la capacidad de decidir sobre como querer vivir y como querer morir".

¿Quién es Truman?

El título del filme lleva el nombre del perro de "Julián", la mascota querida que lo ha acompañado en sus últimos años de soledad, quien duerme con él y comparte cada segundo de su vida, como un hijo mimado o un gran amigo. Tras su decisión de abandonarse a la evolución del cáncer, el personaje de Darín decide buscarle un hogar, para que no lo eche de menos y para que no deje de recibir el amor que él le ha dado, aunque la situación se vuelve muy difícil.

"Yo creo que Truman es el lazo a la vida, es la familia, es el amor, la amistad, el hijo que no quieres perder, es lo que te ata a la vida. Lo que te ata a la vida es la honestidad, la sinceridad, los amigos. Yo creo que es eso, es una película que te ayuda a sincerarte contigo mismo", explica Cámara. 

"Truman" ganó dos galardones en el Festival de San Sebastián 2015, uno en Mejor Director para Cesc Gay y otro doble en Mejor Actor Principal compartido entre Darín y Cámara.

Ahora postula a seis premios Goya, entre ellos en Mejor Actor Principal para Darín, Mejor Actor Secundario para Cámara, Mejor Película y Mejor Guión Original y Director para Cesc Gay.

Actualmente, Javier Cámara graba una serie británico francesa de Paolo Sorrentino, "The Young Pope", donde comparte cartel junto a Jude Law y Diane Keaton.

"Truman" ya se exhibe en la cartelera chilena y es para mayores de 14 años.

Escucha acá más declaraciones de Javier Cámara sobre el filme.