Modificar Ley de Ajuste Cubano ahorraría 2.500 millones de dólares a EE.UU.
El proyecto fue presentado por el senador republicano Marco Rubio.
Iniciativa cuenta con un modelo similar en la Cámara de Representantes promovido por el legislador Carlos Curbelo.
Rubio considera que muchos inmigrantes cubanos alegan ser refugiados del régimen castrista, y sin embargo su situación no es tal.
La modificación legislativa de la Ley de Ajuste Cubano, propuesta por el senador republicano Marco Rubio, supondría un ahorro de 2.500 millones de dólares en diez años a las arcas de EE.UU., según datos de la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO, por su sigla en inglés).
El proyecto presentado por Rubio, bajo el nombre "Ley de Oportunidad de Trabajo para el Inmigrante Cubano", cuenta con un modelo similar en la Cámara de Representantes promovido por el legislador Carlos Curbelo, con lo que pretenden poner fin a ciertos privilegios que acoge la conocida Ley de Ajuste Cubano.
En una intervención en el pleno del Senado, Rubio subrayó el importante ahorro que implicaría a los contribuyentes aplicar estos cambios, y enfatizó que gran parte de esas inversiones se van a manos "de gente que ni siquiera vive en Estados Unidos".
"Tengo la esperanza de que el informe de la Oficina de Presupuesto del Congreso nos dé un nuevo impulso para poner fin a este problema y reformar el sistema", continuó Rubio.
"La manera de hacerlo es mediante la aprobación de una ley que he presentado con el congresista Carlos Curbelo en la Cámara de Representantes y que termina con la suposición automática en la ley estadounidense de que todos los inmigrantes cubanos son refugiados", explicó.
Rubio considera que muchos inmigrantes cubanos alegan ser refugiados del régimen castrista, y sin embargo su situación no es tal, pero igualmente tienen acceso a ciertos beneficios, por lo que pretende implementar un sistema que demuestre que "legítimamente temen por sus vidas si se ven obligados a regresar a Cuba".
La Ley, vigente desde 1966, y la Política de "Pies secos/Pies mojados" establecen que los cubanos que llegan a suelo estadounidense pueden quedarse, mientras que los interceptados en el mar, aunque sea a pocos metros de la orilla, son devueltos a Cuba.
Una enmienda de 1980 de la "Ley de Ajuste Cubano" permite a los inmigrantes cubanos, independientemente de sus razones para abandonar la isla, el acceso al Programa Federal de Reasentamiento de Refugiados.