Paulina García: "Aquí no ha pasado nada" es una película urgente y necesaria
La actriz conversó con Cooperativa sobre la película inspirada en el Caso de Martín Larraín.
Habló de la falta de ética que hay en Chile y de cómo la gente se engaña para acercarse a una clase privilegiada.
"Vicente" es un joven a quien todos apuntan como el supuesto culpable de un atropello con resultado de muerte y ahora atraviesa por un calvario social en medio de una clase privilegiada, todo para encubrir al verdadero culpable: el hijo de una poderosa familia chilena. En una escena, la madre de "Vicente" se acerca para hablarle de responsabilidades y a la vez recorren cariñosamente un pasaje de su infancia, para que luego él termine quejándose de que los que lo culpan ni siquiera eran sus amigos y que ahora se quedará atrapado en Chile, lo que menos quería. El momento es un oasis en medio de la tragedia.
Este oasis está inserto en "Aquí no ha pasado nada", la película inspirada en el Caso de Martín Larraín, y la madre es interpretada por la ganadora del Oso de Plata en Berlín por "Gloria", Paulina García.
"A mí me interesó mucho hacer un personaje tan contradictorio, como la madre de 'Vicente'. Porque es una mujer reconocible, en el sentido de que es esforzada, que ha hecho un camino muy duro para poder estar e intentar pertenecer a una clase que no le corresponde y darle las mejores condiciones a su hijo. Otra cosa es que el hijo es incapaz de comprenderlo, además del problema de que en el medio en que se están moviendo es tremendamente banal", explicó García a Cooperativa.
La actriz recalca que este papel "es contradictorio porque hace un esfuerzo enorme, pensando que es para mejor, y se cruza con la peor parte de una clase social, que se mueve sin medir las consecuencias de la banalidad".
Etica, no moral
El personaje de Paulina García es una más de las "víctimas" del error de "Vicente", pero así como debe vivir la crisis también se transforma en un soporte emocional, en medio de la vorágine de daños colaterales que arroja el hecho de que "el cinco por ciento de los chilenos haga lo que haga nunca irá a la cárcel", tal como dice el lema promocional de esta película de Alejandro Fernández Almendras ("Matar a un hombre", 2014)
La actriz aseguró que "Aquí no ha pasado nada" es "una película urgente, necesaria. Que había que hacerla ahora. Ahora ya, cuando el tema sobre la que está inspirada la película, está todavía caliente".
- Esto es ficción, pero ¿"Aquí no ha pasado nada" puede hablar de una moralidad ambigua presente en Chile, en términos generales?
No creo que tenga que ver con la moral, sino con la ética -apuntó García-. Con la ética que quiere decir: paga tus errores; y con la ética que apunta a culpabilizar a otros, a ser cómplices de esa estrategia. Eso es muy interesante, porque nadie en este país, ninguno de los casos que estamos viendo de los escándalos que ha protagonizado la clase privilegiada de este país, ninguno lo ha hecho sin cómplices.
Por otro lado, no prestarle primeros auxilios a una persona, que has atropellado, es sencillamente de sentido común y no tenerlo hacia otras personas, me parece escandaloso por donde lo mires. Eso es un tema bien interesante cómo se trata en la película.
Quizás el último tema ético en la película, es creer que sacan beneficios si te arrimas a ese árbol de los privilegiados. Cuando todo lo que va a ocurrir es que en 'la familia de Vicente' quedan manchados para siempre, dañados. Cuando te vendes por tan poco, lo pagas para siempre.