Morales asegura estar "preparado" para dejar la presidencia en 2020
El mandatario descartó la posibilidad de realizar una nueva modificación a la Constitución.
Sectores oficialistas iniciaron la campaña para que Morales sea candidato en 2019.
En febrero un 51,3 por ciento rechazó una iniciativa del oficialismo para reformar la Constitución.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, afirmó este viernes que está "preparado" para dejar el cargo cuando concluya su tercer mandato en 2020, días después de que sectores afines a su Gobierno insistieran en que sea candidato nuevamente en 2019.
El mandatario se refirió al asunto en un acto en la ciudad amazónica de Cobija, fronteriza con Brasil, en el que explicó las metas de la llamada Agenda 2025, un programa con políticas de desarrollo para celebrar ese año los 200 años de la independencia de Bolivia.
"No estoy en campaña, por supuesto. Ustedes me han dicho 'váyase', me voy a ir en enero de 2020, estamos preparados para eso, pero cada autoridad que pasa deja siempre planificado, antes no había ninguna planificación", afirmó el gobernante.
El gobernante hizo esta declaración una semana después de que los campesinos y productores de hoja de coca de la zona central del Chapare, su feudo sindical y político, le proclamasen como su candidato en los comicios del 2019, pese a que la mayoría de los bolivianos vetó esa posibilidad en el referendo de febrero pasado.
En esa consulta, un 51,3 por ciento rechazó una iniciativa del oficialismo para reformar la Constitución y permitir que Morales busque en las elecciones de 2019 un cuarto mandato consecutivo hasta 2025.
El mandatario inició su primer mandato en 2006, el segundo en 2010 y el tercero en 2015.
La Constitución solo permite dos mandatos consecutivos, pero un fallo del Tribunal Constitucional permitió a Morales ganar un tercer periodo, con el argumento de que el primero (2006-2010) no cuenta porque el país fue refundado en 2009.
En los últimos meses, Morales y los dirigentes del oficialismo han argumentado que el 21 de febrero la población votó engañada por una "guerra sucia" promovida por la oposición y Estados Unidos para desprestigiar al Gobierno.
Por ello, los sindicatos afines al mandatario han planteado varias veces la posibilidad de repetir el referendo.