Viaje del papa a Chile está "unido indisolublemente" a visita que haga a Argentina
El embajador Mariano Fernández señaló que el propio Jorge Bergoglio se lo comunicó de esa manera.
"Argentina, Chile y Uruguay es para él una unidad de viaje", explicó el diplomático.
"Estamos trabajando y haremos un frente común con Argentina y Uruguay tranquilamente", aseveró el diplomático.
El embajador de Chile en el Vaticano, Mariano Fernández, confirmó que el viaje del papa Francisco a nuestro país está "unido indisolublemente" a la primera visita que haga como sumo pontífice a Argentina.
"En la conversación con el santo padre durante la presentación de credenciales le dije que una de las prioridades de Chile es que nos visite, le dije también que naturalmente entendíamos que la visita a Chile tenía que ser acompañada de la visita a Argentina", dijo Fernández en diálogo con Cooperativa.
"El Cono Sur es una unidad –Chile, Argentina y Uruguay- y cuando haya alguna visita vamos a visitar los tres países, eso fue lo que me dijo", recalcó el embajador.
Antes, en declaraciones recogidas por la agencia argentina Télam, Fernández había manifestó que "con toda paciencia estamos esperando la decisión papal de su viaje a la Argentina, y en el momento que se sepa eso, sabemos que va a viajar a Chile".
"Me lo dijo él mismo (Jorge Bergoglio) en audiencia privada: que el Cono Sur, Argentina, Chile y Uruguay, era para él una unidad de viaje", señaló el ex canciller chileno.
Según explicó Fernández, la "prioridad" de su nuevo cargo (presentó las cartas credenciales el 1 de septiembre) es "que el papa visite Chile".
A partir de la referida conversación, "entendemos perfectamente que la visita a nuestro país está unida indisolublemente a la primera visita que haga el papa a su país natal", señaló.
"Estamos trabajando y haremos un frente común con Argentina y Uruguay tranquilamente", aseveró.
Al líder católico "lo ha invitado la Presidenta, está invitado por la Conferencia Episcopal de Chile y tanto mi antecesora como yo le hemos reiterado la invitación", explicó Fernández, manifestando, de todos modos, que hay "plena comprensión de que el Papa tiene que poner acentos en lugares de crisis que no son América Latina", que es, "objetivamente, un continente de paz".
Fernández también recordó, en sus declaraciones a Télam, la visita que hizo en 1987 a Chile el papa Juan Pablo II, "que fue muy manipulada por la dictadura militar, pero a pesar de eso (...) fue una llamarada en la juventud, que la mantuvo durante un tiempo importante en temas de valores significativos, evitando esa ramplonería que en ciertos sentidos está dominando parte del mundo contemporáneo".
"Si puede venir durante el gobierno de la Presidenta Bachelet, óptimo, si no será más tarde. Yo no lo veo como la primera prioridad cuando están los conflictos en Siria, los inmigrantes muriendo en el Mediterráneo", recalcó Fernández a Cooperativa.
En mayo del año pasado el canciller Heraldo Muñoz anunció que Bergoglio visitaría Chile durante 2016, lo que pocos meses después se empezó a poner en duda. Luego, en enero de este año, el Arzobispado descartó la visita durante 2016 y el cardenal Ricardo Ezzati señaló que la intención del pontífice era llegar a nuestro país en 2017.
Iglesia recuerda anterior visita de pontífice
En tanto, Alejandro Álvarez, vocero de la Fundación Voces Católicas, hizo un paralelo entre el Chile y la Iglesia que recibieron a Juan Pablo II en 1987 y respecto a como se podría recibir a Francisco.
"La Iglesia hoy y en el año 87 es la misma y a la vez distinta. En el año 1987 estaba del lado de los que eran perseguidos por los derechos por los derechos humanos, hoy día la Iglesia está también del lado de la defensa de la vida, especialmente contra el aborto. En los 80 estaba más de moda ser católica y hoy día no está de moda, de hecho para mucha gente puede ser una vergüenza por el tema de los abusos", indicó.
Por su parte, el vocero de la Conferencai Episcopal, Jaime Coiro, recordó que se trataba de "una iglesia que estaba cercana a esos grupos que sufrían, y no necesariamente en el plano político y de la persecución, sino que también a los grupos más vulnerables de esa época".
"La iglesia de hoy evidentemente ha sufrido en los últimos 15 años un golpe muy radical por los abusos cometidos por algunos miembros del clero", dijo.
"Por lo tanto, es una iglesia que ha repensado su caminar y que hoy día se sitúa en una actitud de humildad", precisó Coiro.
La Nunciatura Apostólica no ha entregado más detalles respecto de las declaraciones del embajador en el Vaticano, Mariano Fernández.