Papa Francisco pidió medidas para proteger e integrar a los niños inmigrantes
El sumo pontífice remarcó que este año está dedicado a los "menores inmigrantes, vulnerables y sin voz".
"Estos pequeños hermanos no acompañados están expuestos a tantos peligros. ¡Y son muchos!", resaltó en el tradicional rezo del Ángelus.
"El encuentro entre varias culturas es siempre un enriquecimiento para todos", defendió Francisco.
El papa Francisco afirmó este domingo que es necesario "adoptar medidas para la protección y la defensa, así como la integración de los inmigrantes menores de edad", en un mensaje tras el habitual rezo del Ángelus del domingo.
Asomado a la ventana del palacio pontificio, Francisco recordó que la Iglesia Católica celebra hoy la Jornada Mundial del Inmigrante y el Refugiado y que este año está dedicado a los "menores inmigrantes, vulnerables y sin voz".
"Estos pequeños hermanos no acompañados están expuestos a tantos peligros. ¡Y son muchos!", exclamó.
A la plaza de San Pedro acudieron hoy para esta ocasión varias representaciones de inmigrantes y el papa les pidió que "respeten leyes y tradiciones" y deseó que puedan "vivir serenamente, conservando los valores de vuestras culturas de origen".
"El encuentro entre varias culturas es siempre un enriquecimiento para todos", defendió Francisco.
También agradeció a "todos los que trabajan con los inmigrantes para acogerlos y acompañaros en sus dificultades" y les animó "a continuar con su trabajo y recordar el ejemplo de santa Francisca Javiera Cabrini, patrona de los inmigrantes".
Explicó que la santa "se ocupó del hermano forastero, en el que está presente un Jesús rechazado, humillado y que sufre".
"Y todos nosotros somos forasteros", agregó Francisco.
El pasado 13 de octubre, el Vaticano publicó el mensaje del papa dedicado a los "menores inmigrantes, vulnerables y sin voz" en el que criticaba que en vez de favorecer su integración se busque sólo impedir su entrada en los países o se favorezca su repatriación.
Esta jornada se celebra en un momento en el que las asociaciones humanitarias denuncian la desaparición de cerca de 10.000 menores inmigrantes tras su llegada a Europa.
Sólo en Italia han llegado en 2016 más de 25.800 menores no acompañados, el doble que en el año anterior, y que acaban desapareciendo, viviendo en la calle, en centros de detención o, los más pequeños o afortunados, en casas con familias.