Rector de la Universidad Iberoamericana renunció por problemas financieros
Félix Viveros dejó su cargo debido a la crisis que afecta a la casa de estudios.
En diciembre del año pasado el plantel figuraba con una deuda de 1.200 millones de pesos.
"Los socios acordaron que ya no quedaría en manos del rector la posibilidad de nuevos inversionistas o de una fusión", comentó Narváez, a la izquierda en la foto.
El rector de la Universidad Iberoamericana de Ciencias y Tecnología (Unicit), Félix Viveros, ex integrante del consejo editorial de La Nación y ex secretario general de RN, renunció a su cargo debido a la crisis financiera que afecta a la casa de estudios.
A través de un comunicado, el plantel informó que la renuncia de Viveros se dio "como respuesta a graves incumplimientos que habría cometido parte de la asamblea de socios, representada por Jorge Cárdenas Narváez".
De acuerdo a lo informado este martes por El Mercurio, el Ministerio de Educación analizará los antecedentes del establecimiento para decretar si amerita una investigación bajo la Ley del Administrador Provisional, luego que profesores denunciaran que sus sueldos están impagos desde octubre del año pasado.
Según La Tercera, la Unicit figuraba en diciembre con una deuda de mil 200 millones de pesos, lo que se produjo debido a conflictos al interior de la asamblea de socios, que se acrecentaron durante el verano y motivaron el alejamiento de la fundadora de la universidad, Filomena Narváez.
Además, apunta el rotativo, la institución mantiene impagos los sueldos correspondientes a febrero de los casi 250 funcionarios, además de estar en condición de morosidad con la mayoría de sus proveedores.
"Los socios acordaron que ya no quedaría en manos del rector la posibilidad de nuevos inversionistas o de una fusión, sino que sería tarea del presidente de la asamblea de socios, Jorge Cárdenas. Eso ya trajo durante febrero alta inestabilidad, porque no fue posible seguir asegurando flujos ni tampoco conseguir alguna alianza estratégica", comentó Viveros.
Este lunes 6 de marzo, unos dos mil 900 alumnos debían iniciar su año académico 2017, sin embargo, a través de un correo electrónico y un aviso en el sitio web de la casa de estudios se les notificó que el comienzo de las clases se postergó una semana "por ajustes administrativos".
"Necesitamos un nuevo marco regulatorio"
Tras conocerse la noticia, el senador Ignacio Walker (DC), presidente de la Comisión de Educación, aseguró que ésta es "es casi una tercera crisis (en la educación superior)", recordando que "ya hemos tenido a la Universidad del Mar (que cerrará en 2018), la Universidad Arcis (declarada en quiebra) y ahora tenemos el caso de la Universidad Iberoamericana".
"Todo esto refuerza una cosa muy importante", dijo, apuntando "que necesitamos una Ley General de Educación Superior que pueda fiscalizar bien el uso de los recursos y el funcionamiento y cumplimiento de la ley, creando una Supertintendencia".
En esa línea, Walker destacó que "lo que sí hicimos, hace un año, fue crear la figura del Administrador Provisional y la posibilidad, incluso, del cierre definitivo (de universidades), con un administrador de cierre".
"Ya tenemos una institucionalidad para hacer frente a la crisis", resaltó, pero insistió en que "necesitamos una Ley General de Educación Superior que pueda establecer una nueva institucionalidad, un marco regulatorio".
Gobierno: Es una situación que hay que investigar
La ministra de Educación, Adriana Delpiano, también reaccionó asegurando que que se investigará la crisis que afecta a la casa de estudios y llamó a la tranquilidad a los estudiantes.
"Primero, le diría a la ciudadanía que las situaciones que se han descrito ameritan y obligan a tener el proyecto de Ley de Educación Superior para contar con una Superintendencia fuerte, que pueda prever y anticipar situaciones de esta naturaleza", dijo.
Asimismo, "decirles a los estudiantes -puntualizó la ministra- que la ley también los protege en términos de garantizar que se reciban en la misma universidad o en otra".
Sobre la situación de la universidad, la secretaria de Estado apuntó que, "claramente, que una señora (Filomena Narváez) con sus hijos sea dueña de una universidad es una situación que, aunque formalmente esté constituida como corporación, hay que investigar".
"Tomaremos las medidas para que no vuelva a suceder"
En tanto, tras una reunión entre autoridades y académicos de la institución durante la mañana, el presidente de la junta directiva, Roberto Belmar, ofreció disculpas a los profesores a los que no se les han cancelado sus remuneraciones, situación en la que aseguró se pondrán al día en las próxima horas.
"Reconocemos que estamos en una situación de falta de liquidez", dijo, afirmando que "queremos saber por qué sucedió", para lo que detalló que "le pedimos a un grupo de expertos para que nos diga" las causas de la crisis.
"Y como autoridad mayor de la universidad, vamos a tomar las medidas necesarias para que eso (problemas financieros) no se vuelva a repetir y darles la seguridad a nuestros estudiantes y sus familias", apuntó, resaltando que "ellos (los alumnos) vienen de los sectores para los cuales personas como yo hemos trabajado siempre".
Por su parte, algunos estudiantes, preocupados, prefieren no pensar en lo "peor" sobre el futuro de la casa de estudios, por lo que tratarán de darle "el mayor respaldo" a la universidad.