Presidente de Escondida abre la puerta al reemplazo de huelguistas
"Buscaremos las alternativas que la ley nos faculta", dijo Marcelo Castillo.
La movilización en la minera cumple ya 35 días y ha generado pérdidas de más de 700 millones de dólares, según los trabajadores.
Desde el Gobierno y la CPC insisten en los llamados al diálogo entre las partes.
Sin que se vislumbre una pronta solución, la huelga de los trabajadores de la Minera Escondida cumple 35 días, acumulando pérdidas de alrededor de 712 millones de dólares, según cálculos de los movilizados, que a inicios de esta semana rechazaron una invitación al diálogo por parte de la empresa.
En este escenario el presidente de Escondida, Marcelo Castillo, señaló la importancia de retomar las operaciones, ya sea con los 2.500 trabajadores en huelga o mediante otras alternativas, abriendo la puerta al reemplazo de los manifestantes.
"Queremos retomar dos grandes proyectos que fueron detenidos desde la primera semana de huelga, que no tienen nada que ver con este proceso de negociación y que involucran a trabajadores que no tienen relación alguna con los 2.500 trabajadores que hoy día están en huelga", dijo Castillo.
"Queremos realizar mantenciones en nuestras áreas de trabajo y, finalmente, restablecer las operaciones. Ojalá con nuestros trabajadores. Si no, buscaremos las alternativas que la ley hoy día nos faculta", advirtió el ejecutivo, cuyas palabras encontraron inmediata respuesta en Carlos Allendes, vocero del Sindicato.
"Él entró al juego ahora. Parece que quiere negociar... A ver si nos ponemos al día y nos da él una respuesta como presidente, porque pareciera ser que no tiene ningún efecto. Hasta el día de hoy solamente ese ha pronunciado don Marcos Lagos y sus voceros", comentó Allendes aludiendo al presidente de la comisión negociadora de Escondida.
Gobierno y empresarios llaman al diálogo
Mantener los beneficios de la anterior negociación, respetar los tiempos de descanso y no establecer diferencias entre antiguos y nuevos empleados son las demandas básicas de los huelguistas.
Así, tanto desde el Gobierno como desde la Confederación de la Producción y del Comercio insisten en llamar al diálogo.
"La negociación colectiva y el derecho a huelga son garantías constitucionales en este país. Ese derecho existe, pero insistimos en que el llamado es al diálogo, a acercar posiciones", dijo la ministra del Trabajo, Alejandra Krauss.
"Aquí la responsabilidad es de ambas partes, pero lo que es importante es que, si es una huelga legal, se actúe dentro de la legalidad y no con violencia. Nosotros aspiramos a que se resuelva a la brevedad, mediante el diálogo", dijo el presidente de la CPC, Alberto Salas.