Se inició juicio oral en contra de cinco imputados por muerte de subcomisario PDI
Franco Collao recibió un disparo mientras intentaba repeler un asalto en diciembre de 2015.
El juicio se extenderá por 30 días.
Los cinco involucrados arriesgan cadena perpetua.
Este lunes se inició el juicio oral en contra de los cinco imputados por la muerte del subcomisario de la PDI Franco Collao, ocurrida durante un asalto en el centro de Santiago en diciembre de 2015.
Mientras se encontraba comprando junto a su esposa, Collao, de 38 años, intentó repeler un asalto en un outlet ubicado en la calle Erasmo Escala, que derivó en una balacera en la calle Cienfuegos, donde el subcomisario recibió un disparo.
Los cuatros delincuentes que participaron en el robo y el taxista que los trasladaba se encuentran imputados por el delito de robo con homicidio, según confirmó el fiscal de la Fiscalía Centro Norte, Marcelo Leiva.
"Quien haya disparado es irrelevante, porque todos tienen responsabilidad tanto en el robo como también en el homicidio del funcionario Collao. Ustedes van a ver en el curso del juicio quien es en definitiva la persona que disparó, pero lo relevante es que todos tienen responsabilidad, porque todos sabían que se usaban armas verdaderas", precisó Leiva.
Recalcó que "estamos tranquilos porque sabemos que, independiente de lo que digan los imputados, la prueba que nosotros vamos a rendir, que es de diversa índole, va a aclarar que respecto de todos ellos les cabe participación como actor".
Durante esta jornada declaró uno de los imputados, Esteban Medina, quien reconoció ser el autor material del crimen.
Padres de Franco Collao piden cadena perpetua
Los padres de Collao, presentes en el público, pidieron la mayor de las penas para los involucrados.
"Prefiero cadena perpetua, porque el daño que me hicieron fue muy grande. Tengo rabia, lo único que pido es que se haga justicia", dijo el padre Jorge Collao.
Mientras que la madre, Graciela Ramírez, expresó que "son asesinos y no los voy a perdonar nunca. No soy de las mamás que dicen 'bueno, ya, los perdono', yo no, porque mis nietos no tienen por qué sufrir el dolor de no tener a su papá. El bebé que ha nacido nunca va a conocer a su papá".
Los cinco involucrados arriesgan una pena de cadena perpetua, la que será definida luego de los 30 días en los que extenderá el juicio.