Elizalde y polémica por inversiones: "No creo que impacte a Alejandro Guillier en absoluto"
El timonel negó que la controversia pueda mermar la popularidad y posibilidades del candidato presidencial.
Insistió en que el partido no eludió impuestos, como se acusó en una nota de prensa.
Elizalde habló con Lo Que Queda del Día.
El presidente del Partido Socialista, Álvaro Elizalde, negó que la candidatura presidencial de Alejandro Guillier pueda sufrir algún impacto producto de las polémicas inversiones que realizó la tienda en empresas en el pasado.
"No creo que impacte a Alejandro Guillier en absoluto", dijo enfático Elizalde a Cooperativa, pero descartó profundizar en las críticas que el propio abanderado realizó sobre las inversiones, que calificó como "hechos dolorosos".
El timonel socialista se mostró criticó, además, frente a "una serie de informaciones que se han entregado (...) de manera tergiversada y desactualizada" en la prensa respecto de los dineros del partidos, como supuestas irregularidades en las exenciones tributarias.
"Lo de hoy día me pareció especialmente grave, porque se ha pretendido señalar que hubo un dictamen especial que se aplicaba al estatuto jurídico tributario del Partido Socialista, lo que es absolutamente falso, que ha sido desmentido por el propio Servicio de Impuestos Internos y que, por lo demás, corresponde a la aplicación de una norma que tiene más de cuarenta años de vigencia en nuestro país", fustigó el ex vocero de Gobierno.
"Hemos desmentido categóricamente que el Partido Socialista haya eludido impuestos", señaló, repudiando la pretensión de generar "la imagen de que ha habido ilicitud o ilegalidad en la forma en la cual el PS ha administrado su patrimonio".
Pese a ello, como ha sido la tónica de los últimos días, el presidente del PS reconoció que hubo "errores" en la forma en que se realizaron las inversiones -que ya no existen, pues se cambió a instrumentos de renta fija- y que "los estándares de exigencia no fueron lo suficientemente altos" como para evitar que se realizaran ciertas inversiones que dan pie a eventuales conflictos de interés.
"El error estuvo en que nosotros debimos haber previsto que efectivamente se podían realizar por la entidad administradora, que actuaba con autonomía, determinadas decisiones que fueran en contra de los valores que representa el Partido Socialista", remató Elizalde.