Autor de homicidio de subcomisario de la PDI fue condenado a cadena perpetua
Los otros responsables, Nelson Núñez, Pablo Letelier y Daniel Olivares, fueron condenados a 18 años de presidio efectivo.
Las penas de cárcel son efectivas para los cinco condenados, quienes no podrán acceder a beneficios en el corto plazo.
Carlos Cataldo -el chofer del taxi- fue condenado a 16 años de cárcel.
El Cuarto Tribunal Oral de Santiago condenó a cadena perpetua a Esteban Medina, uno de los cinco implicados en la muerte del ex funcionario de la PDI Franco Collao.
Los otros responsables, Nelson Núñez, Pablo Letelier y Daniel Olivares, fueron condenados a 18 años de presidio efectivo, mientras que Carlos Cataldo -el chofer del taxi- fue condenado a 16 años de cárcel.
La familia del subcomisario manifestó no estar conforme con la pena. Su esposa dijo que esperaban 40 años para los condenados, mientras que el padre de Collao, Jorge, pidió a los magistrados pensar en "los dos niños que quedaron sin papá".
Tras conocer la sentencia, el fiscal Marcelo Leiva dijo que estudiará la resolución para presentar un eventual recurso de nulidad. A su vez, reconoció que "estamos parcialmente conformes, entendemos que el tribunal impuso las penas más altas de nuestro ordenamiento al autor material del homicidio del funcionario".
"Pretendíamos también penas más altas respecto de los otros coautores, pero entendemos que es muy ejemplar", añadió.
Por su parte, el abogado Luis Correa, del Ministerio de Justicia, confirmó que "no compartimos la calificación jurídica que ha dado el tribunal respecto del caso específico de si el subcomisario se encontraba o no en acto de servicio, es una cuestión que vamos a evaluar".
Tanto la familia como la defensa evitó hacer comentarios a excepción del abogado de Olivares, Pedro Castro, quien adelantó que pedirá el recurso de nulidad pues "lo que nosotros estamos discutiendo es la comunicabilidad del dolo y que sea condenado sólo por el robo que ocurrió dentro del lugar y no el hecho que ocurrió después con la muerte del funcionario policial".
Las penas de cárcel con efectivas para los cinco condenados, quienes no podrán acceder a beneficios en el corto plazo.
El detective Collao era ingeniero informático especialista en pedofilia y murió tras intentar repeler un asalto en una juguetería ubicada en el centro de Santiago mientras se encontraba realizando compras en la víspera de Navidad junto a su esposa.